#Columna B You: ¿Cómo cambiar las cosas que te ocurren en la vida?
Nota del editor: Bárbara Barragán es psicoterapeuta especialista en Análisis Existencial y Logoterapia. Ha encontrado su camino y sentido de vida acompañando a otros a encontrar el suyo. Atiende terapias en su consultorio particular, imparte cursos y talleres sobre Logoterapia; y es docente en SMAEL (Sociedad Mexicana de Análisis Existencial y Logoterapia) donde forman nuevos psicoterapeutas.
******
¿Cuántas veces vamos por la vida llenándola de preguntas? Cuestionando una y otra vez cada momento, situaciones, personas y todo lo que se nos ocurra... Esperando que la vida nos de la respuesta, que "alguien" nos las dicte o que mágicamente aparezca frente a nuestra nariz. Pero pocas ocaciones nos hemos detenido a ver que no somos nosotros los que le preguntamos a la vida, sino que es la vida la que nos cuestiona a nosotros.
Y entonces, ¿qué hacemos? Seguramente ya estarás pensando eso. Resulta que la vida, al preguntarnos constantemente nos exige una respuesta, nuestra propia respuesta de vida; según las circunstancias que estemos viviendo. Es entonces que tendremos que volvernos hábiles en responder, no en preguntar y cambiar mucho de cómo hemos ido viviendo.
De todas las preguntas que según tú le haces a la vida, la más recurrente y famosa es: ¿Por qué a mí? La respuesta inmediata nos lleva a ser víctimas de las circunstancias. La invitación está en cambiar la pregunta a una más sana y llena de acción: ¿Para qué a mí?
"¿Para qué a mí?" Es la pregunta que esconde la vida detrás de cada evento que nos sucede, por ejemplo: Es muy diferente "exigirle" a la vida que te responda la pregunta "¿por qué me ‘mandas' a esta persona? A que te cuestiones de una manera diferente como: ¿Para qué me toco vivir esta relación?
Ese cambio, del ¿por qué? al ¿para qué? te llevará a buscar tus propias respuestas, esas que sólo tú puedes descubrir y dar. Pondrás en acción esas respuestas que lejos de dejarte parado te llevarán a moverte, a responder.
A la pregunta "¿Por qué?" le caben infinidad de respuestas, lógicas y otras bastante ilógicas, y casi todas te llevan a un papel de víctima, en el que no vas a ningún lado, es más te entrampa en un callejón sin salida que te paraliza.
Esta habilidad para responder, para responderle a la vida, la cual tenemos que desarrollar si es que queremos adueñarnos de nuestros días, no es otra cosa que la RESPONSABILIDAD.
Se puede entender a la responsabilidad como la capacidad de respuesta, la habilidad que tendrá cada persona para reaccionar a las "ofertas" de sentido implícitas en cada nueva situación, en cada momento. En pocas palabras es la capacidad de hacerte cargo de tu propia vida, de tus propios momentos y elecciones. Respondiendo al sin número de cuestionamientos diarios que la vida nos pone de frente, muchos de ellos quizás, ni siquiera elegidos por nosotros, sino por el destino.
Por eso me encanta la frase de Jean-Paul Sartre: "El hombre nace libre, responsable y sin excusas".
¿Cómo le respondo a la vida en algo que yo no elegí? ¡Pues con tus actitudes!
Tu no puedes cambiar tus limitaciones genéticas, a tu familia, tu pasado, el haber nacido en esta época, en este país, es decir no puedes cambiar todo esto que no elegiste, pero sí puedes cambiar y también ser responsable de todo eso en la forma en cómo vives todas esas limitaciones eligiendo con qué actitud vives cada una de las circunstancias no elegidas, solamente haciéndote responsable de tu actitud, dejas de culpar y comienzas a responder.
Viktor Frankl, padre de la logoterapia, a quien he mencionado en alguna columna anterior, afirmaba bajo circunstancias terribles y no elegidas por él, que "...al hombre se le puede arrebatar todo salvo una cosa: La última de las libertades humanas - la elección de la actitud personal que debe afrontar frente al destino- para decidir su propio camino".
Así que de ahora en adelante hay que ir mucho más conscientes del CÓMO Y PARA QUÉ, pues así podrás dar siempre tu mejor respuesta posible a lo que la vida te pregunte en cada momento. Ábrete a las posibilidades de poder ser mejor cada día y asumir nuevas y mejores actitudes frente al destino.
Tu tarea esta semana será:
- Eligir tres cosas que sí puedes modificar en tu vida, por ejemplo una de ellas podría ser: Llegar a tiempo a tus citas.
- Una vez elegidas las tres cosas modificables, enlista dos posibilidades de cambio en cada una de las tres. Siguiendo con el ejemplo de llegar a tiempo, las posibilidades podrían ser: Salir media hora antes hacia las citas y la otra posibilidad puede ser agendar citas sólo por las tardes libres ¿Por cuál comenzarás? Elige.
- Elige tres cosas que NO puedes modificar en tu vida, un ejemplo puede ser: Quisiera tener otra mamá menos controladora.
- Enlista en cada una, dos nuevas actitudes con las que verás y te posicionarás frente a esto. En el caso de la madre controladora, una nueva actitud podría ser poner límites en tu vida, eligiendo dónde sí permites opiniones y dónde no. ¡ACTÚA!
¡SI LO PUEDES CAMBIAR, CÁMBIALO! SI NO LO PUEDES CAMBIAR, ENTONCES ¡CÁMBIATE!
Nos seguimos leyendo