Los empresarios libaneses más destacados de nuestro país

Su padre Youssef Slim, un católico maronita emigró desde la República Libanesa a los 14 años y cambió su nombre a Julián Slim Haddad. Su madre Linda Helú también era nativa del país de Oriente Próximo.

Se tituló como ingeniero civil por la Universidad Nacional Autónoma de México y desde la adolescencia empezó a invertir en la compra de negocios, los cuales prosperaban casi de inmediato gracias a su excelente visión empresarial.

Pero fue hasta la década de los años ochenta, mientras México pasaba por una crisis importante debido a fugas de capitales históricas, cuando Carlos Slim Helú aprovechó para invertir en la economía y comprar varias empresas al borde de la banca rota.

En algunas entrevistas ha mencionado que si su padre durante plena Revolución Mexicana (1914) le compró a su tío el 50% del negocio "La estrella de Oriente", él también podía salir adelante. "...Si con el país sacudido, sin todavía tener familia, siendo extranjero y sin el arraigo que te da el tiempo confió en México y en su futuro, cómo no iba a hacerlo yo".

Su confianza al país azteca fue recompensada y con creces, pues actualmente es considerado el hombre más rico del mundo con una fortuna aproximadamente 73 mil millones de dólares.

Él nació en México, pero su familia es libanesa, es primo de Carlos Slim . Incursionó en el área empresarial en la década de los 70 al fundar la Casa de Bolsa Acciones y Valores de México, S.A. de C.V., una de las primeras empresas de su tipo en el país.

En ese mismo periodo colaboró en la emisión de la primera Ley del Mercado de Valores y es famoso por ser el antiguo propietario de Banamex (ahora parte de Citigroup) que vendió en varios millones de dólares en 2001. También es dueño de la empresa de telecomunicaciones Avantel, la cual forma parte de Axtel.

Su mayor pasión es el béisbol, así que también ha invertido en dicho deporte y tiene dos equipos: los Diablos Rojos de la Ciudad de México y los Guerreros de Oaxaca, estado en el que radica la mayor parte del año.

Sigue dedicándose a los negocios, pero desde su secuestro en 1994 -por el cual su familia pagó 30 millones de dólares-, ha preferido inclinarse a trabajar con su fundación para erradicar la pobreza en México, así como impulsar su cultura y deportes.

Es el hermano mayor de Arturo (director de Alianzas Estratégicas de Teléfonos de México y de Uno Noticias). Estudió ingeniería civil en la Universidad Anáhuac y se especializó en negocios en la Universidad de Harvard.

Fue presidente de la Comisión Federal de Electricidad y ha tenido una trayectoria destacada en el sector público con puestos como: secretario particular del Estado de México del ex gobernador Alfredo del Mazo (1985-1986), director general de los Aeropuertos y Servicios Auxiliares de México, viceministro de Minas e Industria Básica y, posteriormente, ministro de Energía.

En el sector privado es integrante de los consejos de administración de Grupo Impulsor del Desarrollo Urbano (IDUSA), la constructora Ideurban y Promociones Metrópoli. Por cuestiones de salud tuvo que abandonar algunos de sus cargos como en la CFE, pero no ha dejado de trabajar por completo.

El empresario ha apostado por el negocio editorial, es dueño del periódico La Crónica de Hoy, aunque su fortuna incrementó al hacer negocios en el sector público de México con la implementación de chips de seguridad en diversas identificaciones oficiales.

Desde joven ha practicado el golf, así que también enfocó su visión comercial en dicho nicho y actualmente ocupa la silla presidencial de la Federación Mexicana de Golf de México, con la que implementó, a finales del año pasado, su plataforma virtual iGolf.mx bajo el objetivo de aumentar su comunidad.

Kahwagi Gastine fue otro de los hombres del business que apostó por invertir en diversos negocios durante la época del Salinismo. En algún momento se rumoró que la amistad que mantenía con la líder sindical Elba Esther Gordillo se convirtió en un romance y que juntos crearon estrategias profesionales.