La comentada reacción de Alexia de Holanda al ser abucheada junto a su familia

La familia real de Holanda es abucheada

Como ha sucedido cada tercer martes de septiembre al año, Guillermo Alejandro y Máxima presidieron el Día del Príncipe y estuvieron acompañados por la princesa Amalia, heredera al trono, y también por Alexia, quien el 25 de junio pasado cumplió 18 años.

En el Prinsjesdag, los Estados Generales se reúnen en sesión conjunta ante el trono, en el que el rey da el discurso del trono escrito por el primer ministro y su gabinete. En este discurso, que se realiza en el Ridderzaal o Sala de los Caballeros de La Haya, ante senadores y diputados, el gobierno, a través del rey, anuncia la política que piensa desarrollar en el año siguiente.

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Alexia de Holanda vive feliz por poder ser una ‘princesa rebelde' Al no ser la heredera al trono, Alexia, segunda hija de los reyes de Holanda, canta, toca la guitarra y sueña con un futuro en los escenarios. ¿Lo logrará?

Se trata de una jornada muy protocolaria en la que, por la mañana, las calles de La Haya se preparan para recibir el desfile real. El rey recorre las calles a bordo de una carroza dorada hasta la Sala de los Caballeros. Esta vez, todo fluyó de manera normal pero ya de regreso al palacio de Noordeinde, tras terminar el acto, la familia real holandesa saludó al pueblo desde el balcón.

La reacción de Alexia de Holanda al ser abucheada junto a la familia real

Los reyes y sus hijas, además del príncipe Constantin, hermano del rey Guillermo Alejandro, y su esposa, no fueron aplaudidos. Un grupo los abucheó. Mostraron su descontento mediante silbidos y pancartas en las que se quejaban de las medidas que han tomado en materia de economía.

Al respecto, los reyes y Constantin, lo mismo que Laurentien, apenas se inmutaron ante la protesta. La princesa Amalia, en su segundo Prinsjesdag, tampoco les dio importancia y saludó con un porte muy majestuoso.

Sin embargo, Alexia no pudo fingir ante lo que ocurría al frente y fue inevitable que mostrara cara de sorpresa y disgusto. Se le vio incómoda, mirando hacia los lados y saludando con seriedad mientras las inconformidades aumentaban de tono.

Así fue uno de los primeros actos oficiales de la princesa Alexia, quien no había participado de forma activa en compromisos institucionales hasta apenas junio pasado, cuando cumplió la mayoría de edad.