Harry y Meghan por fin ganan la batalla por los títulos de Archie y Lilibet
Archie y Lilibet se convirtieron automáticamente en príncipe y princesa cuando su abuelo Carlos III accedió al trono después del fallecimiento de Isabel.
Harry y Meghan son padres de Archie y Lilibet(Instagram Alexi Lubomirski)
Bang Showbiz
En su documental para Netflix, príncipe Harry ase guró que en un primer momento presentó una serie de opciones a su padre para que decidieran entre los dos cómo podía seguir sirviendo a la entonces reina Isabel II a lo largo y ancho de la Commonwealth, pero distanciándose de la presión mediática que soportaba en Inglaterra.
Si era necesario, tanto su esposa Meghan Markle como él estaban dispuestos a renunciar al título de duques de Sussex que su difunta abuela les dio antes de su boda en 2018 para que les diera "un respiro" a la hora de controlar su agenda pública.
Sin embargo, el pasado mes de enero Harry dio a entender en una entrevista con Andy Cooper que había cambiado de opinión. Cuando el presentador quiso saber por qué seguía usando el título nobiliario si no quería desempeñar un papel institucional en el seno de la monarquía, él respondió preguntándole qué diferencia podría marcar que lo dejó de lado llegado este punto.
Su postura respecto a sus hijos ha sido mucho más inflexible. Una de las críticas que Meghan hizo al palacio de Buckingham en su entrevista con Oprah fue que se negaran a otorgar el título de príncipe a su hijo Archie, aunque en aquel momento no le correspondiera por derecho propio, y ahora por fin puede decir que ha ganado esa batalla porque su primogénito y su hija Lilibet ya son oficialmente príncipes.
"Los títulos de los niños son un derecho que les corresponde por nacimiento desde que su abuelo se convirtió en monarca. Este asunto se resolvió hace algún tiempo en concordancia con el palacio de Buckingham", recordó un portavoz de los duques de Sussex.
El incidente sucedió durante el viaje de los Sussex a Sudáfrica en septiembre de 2019. (Pool/Getty Images)
Según un decreto emitido por Jorge V en 1917, solo los hijos del monarca o los nietos por línea paterna pueden ser príncipes o princesas del Reino Unido, es decir, que el padre del niño o niña en cuestión debe ser hijo -y no hija- de quien ocupe el trono. La única excepción son los descendientes en primer grado del príncipe de Gales, el heredero, que merecen el título de príncipes y princesas independientemente de su sexo.
Por tanto, Archie y Lilibet se convirtieron automáticamente en príncipe y princesa cuando su abuelo Carlos III accedió al trono después del fallecimiento de Isabel en septiembre de 2021. Se cree que el nuevo rey informó a su hijo de que sus dos nietos podrían utilizar estos títulos en una "conversación privada" que mantuvieron tras el funeral de la reina el año pasado.
Harry y Meghan se refirieron a su hija menor como la princesa Lilibet por primera vez el pasado miércoles en el comunicado que publicaron para anunciar que la pequeña de 21 meses había sido bautizada la semana pasada en una ceremonia íntima celebrada en su casa de California. Hasta hace unas horas en la página web de la monarquía tanto su hermano mayor como ella todavía aparecían como 'Master Archie' y 'Miss Lilibet' en la sexta y séptima posición de la lista de sucesión, pero ahora se cambió para presentarlos como príncipe y princesa de Sussex.
Lilibet, nacida en Santa Bárbara, California, celebró su cumpleaños en Windsor. (Instagram Misan Harriman)
No todos los miembros de la monarquía dan la misma importancia al hecho de que sus hijos sean o no Altezas Reales. En su día, a la princesa Ana se le ofreció la posibilidad de darle este título a sus dos hijos -Zara Tindall y Peter Phillips- por iniciativa de su madre Isabel II, pero la rechazó porque quería darles una vida sin lo que ella consideraba una 'complicación'.
Su hermano el príncipe Eduardo decidió seguir su ejemplo cuando se convirtió en papá de sus dos hijos, que son conocidos como Lady Louise Windsor y James, vizconde Severn. Beatriz y Eugenia, las hijas del príncipe Andrés y primas por tanto de Zara, Pete, Louise y James, sí ostenta el título de princesas porque nacieron como nietas de la soberana a través de su linaje paterno.
