El futuro de casi toda la monarquía Europea es totalmente diferente al que le espera a la Casa Real de Windsor, y es que en los años venideros Reino Unido tendrá reyes, comenzando con Carlos III, siguiendo con William y, más lejos aún en el tiempo, hará lo propio el príncipe George.
En el caso de la dinastía Sajonia-Coburgo y Gotha, la de Orange-Nassau y la de Borbón su futuro yace en sus princesas herederas, Elisabeth, Amalia y Leonor, respectivamente. Pero las dos primeras están ya haciendo sus pininos debutando con su agenda real, en preparación para sus días como reinas, mientras que la española sigue en la escuela.
Publicidad
Es prioritario para las herederas ser mujeres del siglo XXI, con estudios de primer nivel y con las herramientas de diplomacia y de información del orden mundial para hacer su mejor papel, pero también es importante foguearse en el ámbito de los compromisos reales, que serán sus principales ocupaciones.
Para esto la princesa heredera de Bélgica, Elisabeth, acompañará a su mamá, la reina Matilde, quien acaba de cumplir 50 años, a un viaje a Egipto, que marca la primera visita oficial al extranjero de la joven que ya cumplió 21 años. Este acontecimiento tendrá lugar desde el 14 al 16 de marzo de este 2023.
Esta no es la primera vez que Su Alteza RealElisabeth, la primogénita de los reyes belgas, sale de viaje con Su Majestad la reina Matilde, lo hizo durante junio de 2019, durante una visita de cooperación a Kenia, pero en esa ocasión la princesa heredera apareció de manera sorpresiva ante la prensa y la suya no fue catalogada como una presencia oficial.
En este viaje, en el que será recibida por la autoridades con su estatus de representante y futura reina de Bélgica, Elisabeth, y la reina consorte se espera que recorran la famosa tumba de Tutankamón, además de que acudirán a los mismos lugares que visitó la reina Elisabeth durante sus misiones, dijo el especialista real Wim Dehandschutter.
El viaje es de gran relevancia por la relación que tiene la reina Matilde con Egipto, en donde trabajó como voluntaria a los 18 años en los barrios más marginados de El Cairo, y regresó años después para disfrutar de su luna de miel con el rey Felipe de Bélgica, en 1999.
También es de cercanía para toda la familia, ya que pasaron una idílicas vacaciones en el país a finales de 2018, cuando estuvieron en las pirámides de Giza y Luxor, así que la princesa Elisabeth regresa a un lugar que ya conoce, aunque lo hará como la próxima cabeza de la Casa RealSajonia-Coburgo y Gotha.
El palacio real de Bruselas informó que esta visita se engloba como "parte del interés histórico de la familia real por el antiguo Egipto" y supone un "homenaje a la reina Elisabeth, cuyo interés y pasión están en el origen del florecimiento de la egiptología en Bélgica".
Así, Elisabeth tendrá un debut internacional por todo lo alto y arropada por elementos muy cercanos para la realeza belga. La princesa heredera acudirá con la reina Matilde a una exposición sobre la reina Elisabeth de Bélgica (esposa del rey Alberto I) y su relación con la egiptología.
Publicidad
La princesa y la reina tienen un objetivo claro con esta visita oficial, que es la de poner en valor "la experiencia académica belga en el campo de la egiptología al visitar varios sitios arqueológicos donde las instituciones y universidades belgas están activas", y lo harán acompañadas de egiptólogos, profesores y estudiantes belgas.
Otro debut internacional, el de la heredera de Holanda
Próximamente la princesa Amalia de Países Bajos también realizará su debut como la futura reina, ella se va a trasladar a las ex colonias de su país y estará acompañada de sus papás y va a cumplir una agenda que será muy intensa, desde el 27 de enero y hasta el 9 de febrero.
También es el primer viaje oficial de Su Alteza Real la princesa heredera Amalia, quien ha viajado en varias ocasiones al extranjero con sus papás el rey Guillermo y la reina Máxima, pero tampoco lo había hecho en su carácter de ser la heredera a la corona de la Casa Real deOrange-Nassau.
Este viaje había sido puesto en entredicho luego de que la princesa Amalia fue amenazada por un grupo de la mafia de los Países Bajos de ser secuestrada, pero el gobierno ya dijo que sí acudirá, aunque tendrá una semana con un plan que está prácticamente cronometrada.
En su viaje a las islas caribeñas, que comienza en Bonaire, Amalia tendrá la posibilidad de poner en práctica todos sus conocimientos adquiridos en su licenciatura en Política, Psicología, Derecho y Economía, pero además de desarrollar el músculo que necesitará cuando esté al frente de su país como reina.
La princesa Amalia acudirá a las chozas en las que vivían los esclavos; luego, en la costa oeste, disfrutará de un parque nacional, además se acercará al windsurf, deporte icónico del Caribe; hará un viaje en bote por la bahía y conocerá la zona de manglares. Luego se trasladará a Aruba para ir a la universidad, varias sedes del gobierno y museos.
En Curazao escuchará la melodía compuesta para ella, el Vals Amalia, y se unirá a sus papás por el festejo de sus 21 años casados, para la que ofrecerán una cena en la catedral de Doornen, que contará con 21 invitados. Para ir después a Sint Marteen a un encuentro con estudiantes y al final del tour estará en San Eustaquio y a Saba.
Falta la princesa de España
Aunque el rey Felipe y la reina Letizia confian en la princesa de Asturias, Leonor, para ocuparse de responsabilidades de gran envergadura como los premios a su nombre o viajar en solitario con su hermana la infanta Leonor, aún falta su esperado debut en una vista al extranjero, que esperamos suceda una vez que llegue a la mayoría de edad.