El príncipe Harry y Meghan Markle están en desacuerdo con Netflix e incluso con su propio equipo de producción, revelaron fuentes cercanas a los ex p, mientras dan marcha atrás en lo que quieren mostrar al público en sus próximas docuseries. Supuestamente, la pareja quiere eliminar partes del material que han estado filmando durante más de un año.
Pero los jefes de Netflix respaldan a los cineastas de los Sussex que quieren conservar el contenido, según fuentes internas. "Harry y Meghan están teniendo dudas sobre su propia historia, sobre su propio proyecto", expresó el informante que es parte de Netflix. Otra fuente contó: "Harry y Meghan tienen pánico de tratar de atenuar incluso el lenguaje más básico".