Muere a los 18 años soldado que participó en el funeral de Isabel II
Jack Burnell-Williams, un joven soldado de la guardia de la difunta reina de Inglaterra, falleció en los barracones de Hyde Park, donde estaba asignado.
Uno de los jóvenes militares que participaron, el pasado 19 de septiembre, en el funeral de Estado de Isabel II en Londres murió el pasado miércoles, con tan solo 18 años. Se trata del soldado Jack Burnell-Williams, cuyo cuerpo fue encontrado sin vida en los barracones de Hyde Park, en la capital inglesa, donde estaba asignado.
El ejército británico confirmó la noticia en las horas inmediatamente posteriores al suceso, mientras que la policía metropolitana ha descartado que concurrieran circunstancias que puedan ser indicativas de un delito.
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Burnell-Williams, originario del sur de Gales, fue reclutado hace escasos meses para integrarse en el cuerpo de la Caballería Real, según dio a conocer el Daily Mail, y lógicamente su familia está profundamente consternada ante la noticia.
"Jamás en la vida pensé que estaría diciendo esto. Pero nuestra familia tiene el corazón roto tras el repentino fallecimiento de nuestro maravilloso hijo", escribió su madre, Laura, de 42 años, en su perfil de Facebook.
El padre del soldado fallecido no ha querido pronunciarse personalmente, ya que todavía está procesando la trágica noticia. "Está en estado de shock. Lo está pasando muy mal y no puede pensar con claridad", reveló un familiar.
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Sin duda, otra persona que está atravesando un duro momento con la muerte del joven soldado integrante de la Caballería Real y quien participó en el funeral de Isabel II es la novia del prometedor caballero, de nombre Molly Holmes, quien junto a la hermana del soldado, Elisha, se unieron a los cientos de tributos que siguen compartiéndose en las redes sociales, lo que refleja la profunda conmoción que la muerte del todavía adolescente generó en la opinión pública británica.
"Te echaré de menos para siempre, mi amor. Verdaderamente desolada", fueron las palabras que le dedicó Molly al joven Jack Burnell-Williams. "Saldremos de ésta como un buen equipo. Tenemos que conseguir que esté tan orgulloso de nosotros como nosotros lo estamos de él", prometió su hermana, Elisha.
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Así fue el funeral de Estado de la reina Isabel II
El último adiós a Isabel II, la monarca más longeva del Reino Unido, dio inicio con el avance del féretro, cubierto con la corona, el cetro y el orbe –símbolos de la reina–, que fue trasladado sobre un carro de la Royal Navy, tirado por decenas de marinos.
Al son de las gaitas fue seguido a pie por su heredero, el rey Carlos III y los hermanos e hijos de éste, además de ser acompañado por militares de tres regimientos cercanos a la reina, hasta la imponente Abadía de Westminster en el centro de Londres, en cuyas puertas, se sumaron a ellos otros miembros de la Familia Real británica, incluidos el príncipe George, de 9 años, segundo en la línea sucesoria, y su hermana Charlotte, de 7 años.
El deán de Westminster, David Hoyle, dirigió el oficio religioso y el sermón corrió a cargo del arzobispo de Canterbury, Justin Welby, líder espiritual de la Iglesia Anglicana, que alabó la vida de la reina, consagrada a servir a su pueblo.
La reina Isabel II falleció el 8 de septiembre pasado a los 96 años, cuando disfrutaba del verano en su residencia escocesa de Balmoral.