La famosa afición de la reina Isabel II por los corgis ha tenido un impacto en la percepción de esta raza de perros. Se sabe que a lo largo de sus 96 años, la monarca más longeva de Reino Unido tuvo al menos 30 mascotas de esta especie, por lo que después de su fallecimiento el pasado 8 de septiembre, los precios por adquirir este tipo de compañeros ha roto récords en el país europeo.
Tras la muerte de la reina Isabel, el precio de los corgis rompe récords
Un vocero de Pets4Homes, el famoso portal de internet de venta de animales de compañía aseguró que "los precios de los criaderos de corgis registrados han impuesto un nuevo récord" y añadió que el costo de estos animales de duplicó en los últimos tres días.
"En los anuncios más recientes, los precios para algunos corgis superan por primera vez la barrera de las 2.500 libras (3.000 dólares)", indicó el informante.
De acuerdo con los datos del sitio de mascotas, las búsquedas diarias de la raza favorita de la reina Isabel aumentaron diez veces con respecto al interés demostrado la semana anterior.
Los animales se caracterizan por su tamaño pequeño, sus grandes orejas y patas desproporcionadamente chicas, en relación al largo del torso.
Se dice que la devoción de la reina Isabel por estos canes se remonta a su infancia, cuando aún vivía con sus padres, el rey Jorge VI y la reina Isabel madre. En 1933 la familia real dio la bienvenida a Dookie, el primero de la dinastía. Fue tal la cercanía y conexión con sus mascotas, que incluso participaban en muchas de sus apariciones en público.
Su primera corgi, Susan, llegó en su cumpleaños número 18, en 1944. La perra incluso viajó a su luna de miel con el príncipe Felipe, algunos años más tarde, cuando se escabulló en el carruaje real debajo de una alfombra.
Desde la llegada de Susan, Isabel II tuvo más de 30 perros que descienden de su primera corgi. Incluso la monarca creó la raza dorgi, producto de la cruza entre uno de los corgis con Pipkin, un perro salchicha de su hermana, la princesa Margarita.
Desde entonces, la jefa de Estado convivió con al menos 10 dorgis. Su hermana, por su parte, también crió otros tantos. Entre los más renombrados están Cider, Berry, Vulcan, Rum, Brandy, Chipper, Harris, Pickles, Piper, Tinker, y Candy.
Desde 2012, la reina Isabel II tomó la decisión de no criar más perros por el temor a morir antes que ellos. En 2020 falleció Vulcan, su penúltimo dorgi. Hoy sigue con vida Candy, la última de la dinastía de tantas generaciones.
Sin embargo, poco después de que Felipe de Edimburgo ingresara en el hospital privado King Edward VII por complicaciones de salud, la reina recibió en el castillo de Windsor a Fergus y Muick, un dorgi y un corgi, respectivamente, que ahora cuidará el duque Andrew de York.