Las puertas del palacio de Westminster se abrirán al público a las cinco de la tarde, hora local, del miércoles 14 de septiembre y permanecerán así las 24 horas del día hasta su cierre a las seis y media de la tarde del lunes 19 de septiembre, cuando el féretro de la reina Isabel II será trasladado en procesión desde la plaza del Parlamento hasta la puerta principal de la abadía de Westminster en un carruaje de la Marina Real.
Las estrictas reglas que deben seguir los asistentes al funeral de Isabel II
Desde Scotland Yard, la Policía Metropolitana de Londres, calculan que dos millones de personas acudirán a despedirse de Isabel II antes de su funeral de estado y han puesto en marcha un dispositivo de seguridad comparable al que rodeó los Juegos Olímpicos que la capital inglesa vivió hace justo diez años. La diferencia es que esta vez todo tiene que prepararse en cuestión de días.
¿Cuáles son las estrictas reglas a seguir para despedirse de la reina Isabel II?
El gobierno acaba de hacer públicas las instrucciones que deben seguir todos los que deseen presentar despedirse de Isabel II. La primera advertencia que hicieron es que se espera que se formenfilas muy largas, que durarán posiblemente toda la noche, y que habrá muy pocas oportunidades de sentarse porque estará en continuo movimiento.
Este aviso va dirigido a las personas mayores o las familias que planeen ir con niños pequeños. Hoy a las diez de la noche se ofrecerá más información sobre el recorrido concreto de la fila, pero se aclaró de antemano que no podrán establecerse turnos o darse el relevo entre distintas personas. Por otra parte, se prevén retrasos en el transporte público y cierres de carreteras en esa zona del centro de Londres, así que los trayectos hasta Westminster deben planearse con tiempo suficiente.
Los miembros del público pasarán por un control de seguridad similar al de un aeropuerto y con restricciones muy claras: solo se permitirán bolsas pequeñas -40cm x 30cm x 20cm- con un solo cierre y nada de múltiples bolsillos para que puedan revisarse con la mayor facilidad posible. Sin embargo, existirá un punto de consigna para dejar los bultos que no cumplan estas normas.
En la página web del gobierno se publicó una lista con los artículos prohibidos. No se pueden introducir linternas ni botellas de agua en Westminster a no ser que sean transparentes, y los alimentos y líquidos de cualquier tipo deben consumirse en la fila. Las flores u otros artículos de homenaje, como velas, peluches y fotografías, tampoco serán tolerados; cualquier tributo de estas características debe depositarse en la zona de homenajes florales de Green Park.
Por supuesto, quedan terminantemente prohibidos artículos afilados, incluyendo cuchillos, navajas suizas, tijeras, cubiertos y destornilladores, y cualquier objeto que pueda ser utilizado como arma y/o comprometer la seguridad pública (sprays de defensa personal, sprays de pintura, candados, cadenas, equipos de escalada y artículos peligrosos o de riesgo).
Durante la espera, no se podrán lanzar fuegos artificiales ni usar bocinas, bengalas, silbatos, dispositivos láser y otros artículos que disturben la atmósfera solemne a la que se espera que se ciña el público o el descanso de los vecinos. Eso incluye no llevar pancartas, carteles o banderas, ni hieleras, cestas, bolsas de dormir, mantas, sillas plegables o material para acampar.
Por último, las autoridades hicieron un llamado a los británicos y los visitantes. En vista de que se trata de un acontecimiento histórico, pero también de la muerte de una madre, abuela y bisabuela, se pidió que todos los que pasen por el salón donde descansará el féretro de Isabel II se comporten con el debido respeto. Eso implica no grabar videos ni tomar fotografías y llevar una vestimenta apropiada, sin eslóganes políticos o potencialmente ofensivos.