En los últimos días se ha discutido ampliamente cómo cambiarán las vidas y los roles de muchos de los miembros de la Familia Real británica tras la muerte de Isabel II . La duquesa Catalina se convirtió en la primera Princesa de Gales desde la muerte de su suegra Diana Spencer, mientras que Camila –esposa del ahora Rey Carlos III – es ahora reina consorte, algo que resultaba impensable cuando se casó con el hijo de la Reina Isabel hace 17 años. Asimismo, los títulos oficiales de los hijos de Harry y Meghan van a cambiar, lo quieran o no sus padres.
Pero hay un caso que se ha pasado por alto: el de la princesa Beatriz , una de las dos hijas del príncipe Andrés y su ex esposa Sarah Ferguson, y sobrina de Carlos III. La princesa de 34 años, que trabaja como vicepresidenta de estrategia y alianzas en la empresa de software Afiniti, ha ascendido en la línea de sucesión tras el fallecimiento de su abuela el pasado jueves. Aunque oficialmente sigue sin pertenecer al grupo compuesto por los miembros en activo de la monarquía británica, sí será una de las consejeras de Estado del rey Carlos III, lo que significa que puede desempeñar funciones oficiales en su nombre si él cae enfermo o se encuentra en el extranjero, según informa el periódico The Times.