Como futura reina, la princesa Leonor no ha tenido las vacaciones de verano de una adolescente común y corriente, sino que ha debido atender ciertos compromisos de trabajo.
Y no se trata de cualquier evento, sino de su visita a la ciudad catalana de Girona, donde nunca había estado antes, para entregar los premios Princesa de Girona, título que también ostenta la Princesa de Asturias.
Publicidad
La visita le presentaría un reto muy particular: enfrentarse a una comunidad con un fuerte espíritu antimonárquico. Basta decir que en 2017 el rey Felipe VI, padre de Leonor, fue declarado persona non grata en la localidad.
Por ello, estamos seguros de que Leonor, de 16 años, y ya con varios compromisos públicos en su haber, iba bien preparada para encontrar un ambiente ‘mixto’, por decirlo de alguna forma.
En su llegada al Teatro-Museo Dalí de Figueras, la princesa y su hermana menor, la infanta Sofía, fueron recibidas por la ministra de educación y la delegada de gobierno, además de una multitud que esperaba ver a las hijas de los reyes, para bien o para mal.
Un grupo republicano se congregó en las afueras del museo y se escucharon fuertes silbidos cuando las jóvenes bajaron de su coche, además de alguno que otro grito ininteligible. Para suerte de la princesa y la infanta, también hubo quien las esperaba de forma más ‘amistosa’ y no podía esperar para acercarse o tomarles fotografías.
Manifestación en el blanqueo a la Princesa Leonor y la Infanta Sofía en Figueres (Girona)
— Miércoles Republicano ❤️💛💜 (@MiercolesRepubl)
July 4, 2022
Ante los silbidos, la futura reina no mostró reacción alguna, como toda una profesional. Saludó a sus anfitriones y en ningún momento dejó de sonreír, sin mostrarse afectada por lo que ocurría a su alrededor, donde no hubo más incidentes que un breve momento de mal ambiente.
Las actividades en Cataluña continúan para las hermanas. Hoy por la mañana estuvieron -también sin sus padres- en un taller en el Palacete Albéniz y por la noche vendrá el evento más esperado: presidirán la entrega de los premios Princesa de Girona en el Museu de les Aigües en la localidad de Cornellà de Llobregat, a media hora de Barcelona.