A finales de 2021 el médico de la reina Isabel le informó que no podría volver a montar a caballo debido a sus problemas de salud y parecía que ese sería el final de una de sus grandes pasiones porque su movilidad solo ha empeorado desde entonces.
La reina Isabel desafía a sus médicos y vuelve a montar a caballo a los 96 años
Hace unas semanas la soberana tuvo que cancelar una de sus apariciones en las celebraciones del Jubileo de Platino porque el día anterior había pasado varias horas de pie en el balcón del Palacio de Buckingham y eso le había provocado unas "molestias" que le obligaban a guardar reposo.
También se perdió la carrera del Royal Ascot, una de sus citas anuales favoritas, por ese mismo motivo.
Sin embargo, nada ha conseguido mantener a la monarca alejada de sus caballos y recientemente se le vio montando de nuevo por los terrenos del castillo de Windsor.
Disfrutar de más espacio al aire libre fue una de las razones por las que dejó el Palacio de Buckingham y se mudó a esa residencia, y en los últimos meses había utilizado un carrito de golf para moverse por los jardines acompañada de sus adorados corgis.
Que haya retomado su afición por la hípica se ve como una buena señal en su entorno, según explicó una fuente de palacio al periódico The Sun, que últimamente estaba preocupado por la aparente fragilidad de la monarca.