Pero la mañana del último día de los festejos por el Jubileo de Platino; de verde, en honor al recuerdo del amor de su vida, el príncipe Felipe, Isabel II, quién tuvo que ausentarse de la gran mayoría de los festejos por "malestares" provocados por problemas de movilidad sorprendió a Londres, el Reino Unido, la Commonwealth y al mundo, al aparecer.
Fue una gran sorpresa porque se había dicho que era muy probable que no estuviera en el trascendental espacio para su reinado, pero había reservado otro gesto, que tuvo quizá un precedente durante el servicio en el que se rememoró al duque de Edimburgo, aunque en ese momento, por respeto las cámaras no la tomaron de lleno.
Pero ahora fue diferente, la reina fue captada de frente en uno de los momentos más emotivos durante sus 70 años al frente del Estado, el close up dejó ver su rostro conmovido, apretando los labios justo en el instante en el que cientos de miles entonaban el himno que ha marcado la segunda era Isabelina; Good Save the Queen.
El simbolismo
La expresión de su majestad británica es comprensible, está ante el final de su servicio público, ya será más común que otros miembros senior de la Casa de Windsor la representen, como sucedió con los tradicionales viajes por el reino y la Mancomunidad, pero también vimos el futuro hoy en distintos momentos de este 2022 en el marco de Jubileo del Platino.