Hace un año resultaba muy difícil imaginar a la incansable Isabel II necesitando asistencia para caminar en sus apariciones públicas, pero los problemas de movilidad que ha experimentado en los últimos meses han conseguido que verla apoyada en un bastón se convierta en algo habitual.
El detalle especial en el bastón de la reina Isabel en el encendido de faroles
De hecho, se consideró un auténtico triunfo que ayer no tuviera que utilizar una silla de ruedas para acudir al desfile "Trooping the Colour", aunque pagó el precio de pasar tantas horas de pie y hoy canceló su asistencia a la misa de acción de gracias en la catedral de San Pablo.
Como todo lo que hace y dice Isabel II, el bastón que utilizó en el encendido de faroles, que cerró la primera jornada de celebraciones por su 70 años de reinado, también guarda un significado muy especial.
Se trata de un regalo de las fuerzas armadas que incluye una dedicatoria expresando su admiración generalizada por la devoción que ha demostrado la reina durante toda su vida al servicio del país: "El Ejército presenta su leal apoyo a la soberana en su Jubileo de Platino. MCML 11 - MMXX 11".
Este obsequio fue entregado en mano a un miembro del personal de Isabel por el general Sir Mark Carleton-Smith, quien más tarde explicó al periódico Daily Telegraph que había elegido un artículo "personal, relevante y práctico".
A la monarca británica le encantó la idea, y quedó especialmente complacida con el diseño del bastón fabricado por el artesano Dennis Wall.