Este lunes el Metro de Londres contó con un pasajero muy ilustre: el príncipe Eduardo. El noveno en la sucesión al trono no estaba 'de servicio' ni se había subido al vagón como parte de una visita oficial, como sí hizo al día siguiente mientras acompañaba a su madre en la inauguración de una nueva línea en honor a su Jubileo de Platino.
¿A qué miembro de la familia real le gusta usar el Metro de Londres?
El hijo menor de la soberana británica, de 58 años, venía de pasar el día con los jóvenes ganadores de un premio creado por su fallecido padre, el duque de Edimburgo.
Como buen caballero inglés, iba vestido impecablemente con un traje de color azul, una corbata a juego y un paraguas en la mano.
El príncipe Eduardo, que iba acompañado por otro hombre, se subió a un Metro de la línea Jubilee en la estación de Green Park y se bajó en Waterloo.
Lo más sorprendente es que consiguió realizar el trayecto sin causar demasiado revuelo, aunque sí que le tomaron alguna que otra fotografía a escondidas.
El Palacio de Buckingham confirmó que efectivamente era él, y que no es nada raro que utilice este medio de transporte público.