William y Kate admiten su "fracaso" en misión que les encomendó la reina
A pesar de su gran carisma, hubo poco que los duques de Cambridge pudieran hacer frente a las voces anti monarquía de los países que visitaron en el Caribe.
El príncipe William terminó una gira turbulenta por el Caribe admitiendo este fin de semana que son las antiguas colonias británicas quienes deben decidir sobre el papel de la monarquía en sus países.
El duque de Cambridge, de 39 años, también insinuó que, en el futuro, podría no ser la realeza británica quien dirija a los 54 países de la asociación de la Commonwealth, a medida que evoluciona la asociación política con las ex colonias.
Publicidad
Los comentarios inusualmente sinceros, publicados en las portadas de varios periódicos británicos el domingo, se produjeron tras una tumultuosa gira esta semana por tres países del Caribe, que generó protestas y críticas.
William y su esposa Kate, de 40 años, tuvieron que hacer frente a pedidos de disculpas por el comercio de esclavos que ayudó a hacer fortunas de la realeza británica, entre otros temas.
También se vieron obligados a enfrentarse a los cuestionamientos de algunas antiguas colonias, que toman a Barbados como ejemplo.
Barbados se declaró formalmente República en noviembre del año pasado.
Se dice que Belice, Jamaica y las Bahamas -territorios incluidos en la gira real- están reflexionando sobre el tema.
En este sentido, podría considerarse ésta una "misión fallida" para los duques de Cambridge, que viajaron en nombre de Isabel II para conmemorar su Jubileo de Platino, sí, pero también para tratar de "animar" a los países caribeños a continuar formando parte del Commonwealth.
Publicidad
El primer ministro de Jamaica, Andrew Holness, le dijo a William frente a las cámaras de televisión que la nación estaba "avanzando" como un país independiente.
"Sé que esta gira generó preguntas agudas sobre el pasado y el futuro (de las excolonias)", indicó el duque de Cambridge en una declaración al término de la gira el sábado.
"En Belice, Jamaica y Bahamas,es el pueblo quien decidirá su futuro", agregó precisando que él y su esposa "están comprometidos con el servicio" y eso significa "no decirle a la gente qué hacer" sino "servirlos y apoyarlos".