Ayer, la noticia de que el juez Kaplan de Nueva York había considerado que la demanda en contra del príncipe Andrés por abuso sexual procedía y debía ser llevada a la corte sacudió al mundo de la realeza.
No se sabe aún qué sucederá: si el duque irá a tribunal a defender su caso o si finalmente optará por pagar a su demandante, Virginia Giuffre, para llegar a un acuerdo económico fuera de la corte, pero es un hecho que el deseo de los abogados de Andrés -que el juez desestimara el caso- no se cumplió y habrá consecuencias.
El príncipe ha negado “categóricamente” las acusaciones de Giuffre, que asegura que el príncipe abusó sexualmente de ella cuando tenía 17 años y en repetidas ocasiones, pero poco importa lo que diga: su reputación ha sido dañada irreparablemente. Las consecuencias, sin embargo, van más allá de eso. Hay una larga lista de cosas que están en juego para el duque de York.
Título de Su Alteza Real
El príncipe Andrés dejó todos sus deberes reales en noviembre de 2019, tras haber solicitado a la reina un permiso para retirarse, al menos temporalmente. Dado el tamaño del escándalo en que está envuelto, a Andrés podría pedírsele que deje de usar el título de Su Alteza Real, tal como sucedió con los duques de Sussex cuando optaron por irse a California y dejar de ser miembros senior de la familia real.
Título de duque de York
Se ha especulado sobre si se le retirará el título de duque de York, un regalo de su madre cuando se casó con Sarah Ferguson en 1986. Según el diario The Guardian, el biógrafo real Christopher Warwick asegura que existen leyes con respecto a los títulos y que sólo se retiran a “enemigos reales”. “Andrés no es enemigo de la Gran Bretaña, por lo que difícilmente sería objeto del Acto de Privación”.
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Títulos militares
Andrés tiene 15 títulos militares, dado que sirvió en la Marina Real británica por 22 años. Uno de sus más grandes éxitos fue participar en la Guerra de las Malvinas, de la que regresó a Inglaterra como un héroe. Algunos de estos títulos, como el de Coronel de la Guardia de Granaderos, serán difíciles de mantener.
Así como su reputación afecta a la familia real, también a los grupos militares a los que pertenece. Julian Perreira, antiguo sargento, dijo al Daily Mail que al cuartel de granaderos “le cuesta trabaja brindar por el príncipe Andrés al final de las cenas del regimiento”.
La presión de sus colegas, que ya se deja ver en los medios –incluso lo han llamado “tóxico”–, no hará que lo despojen de sus títulos pero sí que él mismo tenga que renunciar a algunos de ellos.
Cargos honorarios
Su cargo de embajador de comercio para Gran Bretaña está perdido desde 2019, cuando dejó todo deber real. También fue obligado a renunciar a su puesto de canciller en la Universidad de Huddersfield. Por ahora, sigue siendo miembro honorario de más de 100 causas e instituciones, como lo son sus hermanos, los príncipes Carlos, Ana y Eduardo. Es posible que muchas de estas organizaciones pidan su renuncia a partir de la decisión tomada por el juez ayer.
Daño económico
De no ganar el caso, el príncipe perderá millones de dólares, aunque la cantidad no es clara aún pues la demanda no especifica la suma que Giuffre busca específicamente. A esto habría que sumarle los cargos por daños y el millonario costo de sus abogados. Afortunadamente para el duque, se informó que al fin encontró compradora para el chalet suizo que puso en venta para aliviar sus deudas, con un valor de casi 24 millones de dólares.