Si hay un evento que la Reina Isabel II disfruta llevar a cabo cada año es pasar la Navidad en Sandringham. Asiste, acompañada de los miembros más cercanos de su familia, a la misa de Navidad en la iglesia de Santa María Magdalena junto a más de 200 feligreses y, a su salida, permiten que se acerque la gente y tenga contacto con ellos.
Malas noticias para Isabel II: uno de sus eventos favoritos ha sido cancelado
Debido al aumento de casos en el Reino Unido y a la preocupación por la variante Omicron, la Reina ha decidido de cancelar su celebración anual en Sandringham como medida de precaución. La decisión no debe haber sido fácil pues suele pasar una larga temporada en esta propiedad, normalmente de finales de diciembre a febrero. Con el fin de tratar de salvar su viaje, la Reina no estuvo presente en la pasada misa dominical del Castillo de Windsor.
Entre los invitados a esta tradición que data de 1988, suelen estar sus hijos, sus nietos y bisnietos. Se esperaba que este año estuvieran presentes el príncipe Carlos y su esposa Camila de Cornwall, William y Kate de Cambridge con sus tres hijos, Eduardo y Sophia de Wessex, el Príncipe Andrés y sus hijas las princesas Eugenia y Beatriz, con sus respectivas familias.
Es prioridad proteger a la Reina más que nunca pues sonaron las alarmas en octubre pasado, cuando debió cancelar un importante viaje a Irlanda del Norte y pasó una noche en el hospital por consejo de sus médicos.
Es una Navidad complicada para la monarca, pues es la primera que pasa sin su esposo, el Duque de Edimburgo, quien falleció a los 99 años en abril pasado. Además, esta semana se anunció que se cancelaría formalmente su comida prenavideña, en la cual se reúne con su familia extendida.
Afortunadamente, la Reina no pasará las fiestas sola, sino que estará acompañada por su familia en el Castillo de Windsor.