La familia real holandesa lamentó el miércoles haber invitado a 21 personas para el 18º cumpleaños de la futura reina Amalia la semana pasada, muy por encima de lo que exigen las medidas sanitarias.
"La familia (real) estaba convencida de tratar de manera responsable las normas del coronavirus con esta reunión al aire libre y con las precauciones tomadas", como las pruebas y el distanciamiento social, explicó el primer ministro holandés, Mark Rutte, en una carta al Parlamento.