La princesa Amalia de Holanda cumplió ayer martes 18 años, la edad que la convierte oficialmente en la heredera del trono neerlandés, un destino que admite haber asimilado en su adolescencia, aunque renuncia de momento a su sueldo hasta que termine la universidad y tenga, dijo, “algo que ofrecer a cambio”.
El primer ministro holandés, Mark Rutte, la felicitó con una de las fotografías publicadas con motivo de su cumpleaños: “¡La princesa de Orange cumple 18 años! Un momento especial para nuestro país y algo maravilloso para ella. Mis más sinceras felicitaciones a la princesa Amalia. Le deseo un día agradable y sobre todo festivo”, escribió Rutte en su cuenta oficial en Twitter.