Ayer lunes, se generó mucha expectativa alrededor del estreno del documental presentado por la BBC, The Princes and The Press (Los príncipes y la prensa), que finalmente salió al aire por la noche en Londres.
Los que estaban especialmente enojados y preocupados eran la reina Isabel II, el príncipe Carlos y el príncipe William, pues dado que la cadena de televisión no les permitió ver el contenido antes de su transmisión, temían que se revelaran o retomaran asuntos con respecto a la supuesta guerra mediática entre William y el príncipe Harry, en la que aparentemente ellos, o sus asesores, habían filtrado o plantado información falsa en los medios para hacer quedar mal al otro.