De no haberse casado el príncipe Rainiero con la actriz Grace Kelly en 1956, los miembros de la Casa Real y la historia de Mónaco hoy serían otros. La familia Grimaldi (Alberto, Carolina, Estefanía, Carlota, Andrea, Pierre, etc.) luciría muy diferente a la actual.
Esta idea surge luego de que en una reciente docuserie, Royals: Keeping the Crown, de la plataforma Curiosity Stream, se asegurara que el príncipe monegasco quería casarse con “otra princesa de Hollywood”, Marilyn Monroe, y no con Grace Kelly, para así lograr su objetivo de asegurar el trono y el futuro del principado.