El miércoles pasado, el helicoptero Sikorsky S-76 de la reina Isabel II tuvo que aterrizar minutos después de haber despegado del aeropuerto de Newcastle debido a una inusual falla técnica, reportó el diario The Sun.
Se dirigía al Castillo de Balmoral, donde debía recoger a la hija de la reina, la princesa Ana, pero el viaje de 322 kilómetros tuvo que cancelarse para que la aeronave pudiera ser revisada por mecánicos.