Es una costumbre que los miembros de la familia real que tienen un rango militar como el príncipe Carlos, la princesa Ana, el príncipe William y el príncipe Harry , quien, por cierto, hace unas semanas perdió sus últimos títulos, usen sus uniformes en ocasiones estatales, sin embargo, en el funeral del duque de Edimburgo irán vestidos de luto.
De acuerdo con la revista People, la reina Isabel II habría pedido a todos los asistentes al funeral del duque de Edimburgo, que no vistan ningún tipo de uniforme militar y que se limiten a llevar trajes formales y marcados por el color negro, símbolo universal del luto, para despedir al príncipe Felipe en el castillo de Windsor.
La soberana romperá con una de las tradiciones que han venido definiendo históricamente los actos fúnebres de los consortes del monarca, especialmente cuando estos han servido en las fuerzas armadas del país.