Hace unos días te informamos en Quién que la reina Isabel II recibió un regalo muy especial: dos corgis, la raza más cercana a su corazón —y que dejó de criar tras la muerte de Susan y para evitar que se queden solos cuando ella ya no esté—, ahora ya decidió qué nombres ponerles, y son muy especiales.
Según publicó el periódico 'The Sun' los dos nuevos integrantes de la familia real, que llegaron en febrero, justo después de que el príncipe Felipe fue hospitalizado, ya recibieron sus nombres de parte de la soberana, quien quiso hacer un homenaje a personas y lugares que son de sus más queridos.
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De acuerdo con fuentes cercanas a la familia real, los 'dorgis' (llamados así por la prensa británica, por ser una cruza entre un corgi y el perro dachshund de la princesa Margarita) recibieron, uno el nombre de Fergus en honor al tío de Isabel II, Fergus Bowes-Lyon, y el segundo Muick.
Bowles-Lyon fue un soldado en la Primera Guerra Mundial, quien murió en combate a los 26 años durante la Batalla de Loos, en 1915. Fue enterrado en una cantera en Vermelles, Francia, donde se perdieron los detalles de su tumba, pero que inició una bella tradición.
Las novias reales dejan sus ramos de boda en la tumba del Guerrero Desconocido en la Abadía de Westminster en homenaje a él, desde que la reina madre inició la costumbre hace 98 años. El segundo 'dorgi' se dice que fue comprado por dos mil 650 libras esterlinas, a un criador a través de la página web 'Pets4Homes'.
Este perrito originalmente fue llamado Charlie, pero después cambiaron su nombre al de Muick (pronunciado Mick), que es un tanto inusual, pero la explicación es que así se le conoce a uno de los lugares favoritos de la reina Isabel II, el Lock Muick en su castillo de verano Balmoral, en su propiedad en Royal Deeside, Aberdeenshire, Escocia.
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En el sitio, de agosto a septiembre, la monarca realiza caminatas y picnics. Los nombres, dijo una fuente son "extremadamente conmovedores y queridos por la reina. Loch Muick es uno de sus lugares favoritos en la finca de Balmoral y la familia todavía honra la pérdida del tío Fergus en la Primera Guerra Mundial".
De acuerdo con la prensa británica, Isabel II "está encantada" con la llegada de los dos perritos: "Es impensable que la reina no tenga corgis. Es como si la Torre de Londres no tuviera cuervos. Sólo han estado allí un par de semanas, pero se dice que son adorables e hicieron del castillo su hogar".
Se sabe que las mascotas han traído mucho ruido y energía al castillo, mientras que el príncipe Felipe estaba en el hospital. Aunque estos dos compañeros son muy especiales, también son los primeros que no son descendientes de Susan, que la soberana recibió como regalo de su cumpleaños 18, en 1944.