Luego de la polémica entrevista que Meghan Markle y el príncipe Harry dieron a Oprah Winfrey, para hablar de las razones que los motivaron a separarse de la familia real, así como su relación con algunos de sus miembros, recientemente se dio a conocer que el duque de Edimburgo no está al tanto de lo que ocurrió, ya que se encontraba hospitalizado en ese momento.
La corresponsal de realeza de la edición estadounidense de Vanity Fair, Katie Nicholl aseguró que la familia Windsor ha hecho todo lo posible para que la controversia que se generó a partir de la entrevista, no llegue a oídos del esposo de la reina Isabel II, quien fue dado de alta el martes de esta semana, tras 28 noches en dos hospitales de Londres.