Otro de los secretos que quedaron al descubierto durante la entrevista de Oprah Winfrey a Meghan Markle y el príncipe Harry es que una vez que informaron su deseo de salir de la familia real perdieron los apoyos económicos que tenían de parte de ellos. ¿Cómo se han mantenido económicamente desde entonces?
“Tengo lo que me dejó mi mamá y sin eso no hubiéramos podido hacer esto”, dijo el príncipe en la transmisión de CBS.
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A principios de enero del año pasado, la pareja habló abiertamente sobre su deseo de independizarse de la familia real y, a partir de entonces, una de las grandes incógnitas fue cómo solventaban sus gastos una vez que dejaron de percibir dinero de los contribuyentes británicos. Con la revelación de Harry ahora todo cobra sentido y se entiende que gracias a la princesa Diana los todavía duques de Sussex lograron iniciar una nueva vida en Estados Unidos.
Las palabras del príncipe al decir “no hubiéramos podido hacer esto” no fueron en vano, pues tanto el año pasado como en el transcurso de este 2021, la pareja ha tenido importantes gastos.
En sus primeros meses de independencia, Meghan y Harry tuvieron que cubrir los gastos por las remodelaciones de su residencia de Frogmore Cottage, lo que significó el de pago 2.5 millones de libras, mismos que se comprometieron a devolver en las negociaciones con la reina Isabel II sobre los términos de su salida de familia real.
Poco después, la pareja compró una residencia en Montecito, California, con valor de 14 millones de dólares. La propiedad cuenta con nueve habitaciones, alberca, cuarto de juegos y 16 baños.
Además, a partir del 1 de abril tuvieron que pagar ellos mismos su seguridad. Pagan a una empresa privada aproximadamente cuatro millones de dólares anuales, un gasto con el que aparentemente no contaban.
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A esa cuenta hay que sumar los gastos del día a día que son imposibles de calcular. Medios como el portal español Vanitatis calcula una suma de 20 millones de dólares durante esos primeros meses de independencia sin ingresos. Por esa razón y sin pensarlo, Harry tomó su fortuna personal que se estima en 30 millones de libras, así que tampoco es que hayan tenido que ajustarse demasiado.
La fortuna del príncipe Harry proviene de tres fuentes principales. La primera es la asignación anual que el duque recibió durante años desde que se convirtió en miembro trabajador de la familia real. Otra es la herencia que le dejó su bisabuela, la Reina Madre después de fallecer, misma que se estima en 14 millones de libras.
La mamá de la reina Isabel pidió que su herencia se repartiera entre William y Harry, dejando a este último la mayor parte porque él no tendría los beneficios económicos que conlleva ser rey. Finalmente, también cuenta con la herencia que le dejó la princesa Diana, que conformaría la mayor parte de su fortuna actual.