Tras dos años de idas y venidas, Meghan Markle consiguió una victoria en el marco de su demanda contra el tabloide británico The Mail On Sunday, después de que un juez haya determinado que sí se invadió su privacidad al hacer pública una carta escrita de su puño y letra que ella había enviado a su papá, Thomas Markle, en agosto de 2018 rogándole que dejara de hablar con la prensa.
De esta forma, la duquesa de Sussex se ahorró el mal trago de verse obligada a acudir a un juicio en el que probablemente se hubiese cruzado con el ex director de iluminación, con quien no tiene relación desde hace varios años.