Tras darse a conocer este miércoles que un grupo de simpatizantes de Donald Trump irrumpió en el Capitolio cuando se certificaba el triunfo de Joe Biden, el príncipe Alberto de Mónaco se mostró impactado e incrédulo al ver los actos violentos que se desarrollaron en el lugar.
“Este no es el Estados Unidos que conozco, en el que crecí parcialmente, en el que fui a la escuela. El presidente Trump debe rendir cuentas”, dijo el príncipe de 62 años a la revista People.
“Estaba en nuestra casa de campo de Roc Agel, así que en cuanto puse las noticias antes de acostarme, ahí estaba, en vivo desde las calles de Washington. Es simplemente increíble. Todavía estoy en shock, pero, al mismo tiempo, no estoy totalmente sorprendido porque desafortunadamente, aquí es hacia donde nos dirigimos”, añadió.
“Mi reacción inmediata fue de sorpresa. Mi esposa [la princesa Chalène] ya se había dormido y le dije después. Fue conmoción e incredulidad y luego, rápidamente, se convirtió en disgusto, de verdad. Pero también enojo por cómo pudo haber sucedido esto y cómo fue impulsado por el presidente Trump”, dijo Alberto.
“Hace meses sentí que habría grandes problemas en cualquier dirección que fueran las elecciones. Es un momento muy sombrío, no solo en Estados Unidos, sino en la historia mundial contemporánea: un presidente todavía en el cargo que, directa e indirectamente, provocó disturbios como estos. Estoy de acuerdo con quienes han dicho que el presidente debe rendir cuentas por esto”.
Los disturbios dejaron como saldo cuatro personas fallecidas, incluyendo una mujer que recibió un disparo mortal. Ante la inusual protesta, Alberto II recordó que su mamá, la fallecida actriz Grace Kelly, creció en los Estados Unidos y estudió en el Amherst College de Massachusetts.
En otra entrevista previa que dio también a la revista People, Alberto de Mónaco expresó que a pesar de los obstáculos y desafíos de las elecciones que se llevaron a cabo en noviembre del año pasado, sentía esperanzado.
“Nunca antes habíamos visto algo así. Es un gran cambio de mentalidad y un cambio de valores. Esta gran adhesión a estas teorías, este seguimiento ciego de alguien que claramente no está bien, que está delirando. Cómo llegamos a este punto, es lo que me preocupa”, dijo en su momento el príncipe.
