El príncipe William y su esposa Kate Middleton buscan a una persona "con experiencia" para que ayude a gestionar el día a día en su hogar del palacio de Kensington y que cuente además con una amplia habilidad organizativa para ocuparse de parte de las responsabilidades habituales del personal 'senior' cuando resulte necesario.
Al igual que se exige a todo el que trabaja en las residencias oficiales y privadas de la monarquía británica, se espera que el nuevo miembro del servicio mantengan unos niveles de "confidencialidad" y "discreción" acordes a su puesto en todo momento, lo que en la práctica se traduce como 'nada de hablar con los tabloides' acerca de los asuntos del matrimonio.