Aunque Meghan Markle pasó de ser una actriz de Hollywood a miembro de primer rango de la Casa de Windsor en mayo de 2018, que su mamá Doria Ragland nunca cambiara su estilo de vida y que no se mudara a Londres cuando nació su nieto, Archie Harrison, como muchos medios británicos lo aseguraron, causó tanta polémica como ahora que dejó de ser instructora de yoga y consiguió un nuevo trabajo, meses después de que los duques de Sussex se mudaron a California.
El portal británico Express publicó que la mujer de 64 años es la nueva directora ejecutiva de la empresa Loving Kindness, dedicada al cuidado de personas mayores, y aunque en su juventud también trabajó como enfermera, este cambio de actividad provocó que se pusiera en duda sus capacidades y se sugiriera que el puesto lo consiguió gracias a la influencia de Meghan.