La salida de Meghan Markle y el príncipe Harry de la familia real no solo significó su independencia económica y tener el poder de decidir en qué emplearse, también la pérdida de algunos privilegios, entre ellos sus títulos militares.
La semana pasada, el duque de Sussex tuvo una reunión por Zoom con algunos líderes de la Commonwealth, en la que, además de recordar el trabajo que hizo su mamá, la princesa Diana, en la organización, también habló sobre los estragos mentales que está viviendo la población mundial durante el aislamiento por la crisis sanitaria por el coronavirus.
"En este momento estamos viendo situaciones en todo el mundo donde la división, el aislamiento y la ira dominan a medida que el dolor y el trauma salen a la superficie. Pero ustedes son la gran esperanza. Estoy convencido que este mundo tiene futuro porque está en sus manos”, dijo Harry.