Alberto de Mónaco ya se encuentra plenamente recuperado, después de ser de los primeros royals en contraer COVID-19 a mediados de marzo. El monarca del país de la Côte d'Azur ha decidido sentar el ejemplo en este regreso a la nueva normalidad, que sucede poco a poco en diversas naciones de Europa.
El hijo de Raniero III eligió, para retomar su agenda pública, visitar un centro de pruebas de coronavirus, en donde aceptó practicarse una y se le vio muy respetuoso con los protocolos de sana distancia, uso de tapabocas, además, de que su semblante estaba calmado, tenía una actitud relajada y estaba muy sonriente.