En medio de la crisis e incertidumbre que ha generado la pandemia de coronavirus en la Casa de Windsor , tras el resultado positivo del príncipe Carlos a la prueba de COVID-19 y la preocupación por la salud de la reina Isabel II y de Felipe, duque de Edimburgo; ha sido la nueva generación la que ha dado con su ternura "una bocanada de aire fresco" al mundo entero.
Hace unas días la familia real de Holanda mostró su apoyo a los médicos, enfermeras y todos los trabajadores del sector salud por su lucha sin cuartel a la enfermedad, ahora han sido los principitos George, Louis y Charlotte los que han querido darles ánimos a estos superhéroes sin capa que trabajan diario para curar a los pacientes y detener el avance del virus.