A pesar de los seis grados que marca el termómetro en estos momentos en Londres y de la fuerte lluvia que cae, Meghan Markle llegó a los Endeavour Fund Awardscon un vestido azul de manga corta de la firma de Victoria Beckham, que literalmente la hizo brillar.
Mientras Meghan la sujetaba del brazo, Harry caballerosamente cubría con una sombrilla a su esposa. Los dos se mostraron muy sonrientes y felices de participar en la ceremonia de entrega de los premios, que se encargan de reconocer las increíbles historias de los miembros de las Fuerzas Armadas que gracias al deporte han logrado su recuperación y adaptación luego de haber sufrido lesiones o enfermedades graves en el ejército.
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Estos premios son una gran oportunidad de reconocer el esfuerzo y valentía para salir adelante en una situación nada fácil. Para Harry era una de las fechas más importantes del año y seguro que esta noche no ha sido nada fácil pues es uno de sus últimos actos antes de que pierda su título como capitán General de los Marines Reales. Algo que , se sabe, le duele profundamente.
Fue Meghan la encargada de entregar uno de estos reconocimientos que se llevaron a cabo en Mansion House. Una fuente cercana a la exactriz aseguró al diario Express que ella está "encantada" de regresar a Gran Bretaña: "hay muchas cosas que extraña, por lo que la oportunidad de volver es algo que realmente estaba esperando", agregó.
"Ella está emocionada y honrada de ser parte de tantos eventos importantes",la misma persona comentó que está muy orgullosa de Harry porque sabe el gran trabajo que ha hecho su marido en estos reconocimientos.
Esta noche era uno de los actos oficiales más importantes en la agenda y el corazón del príncipe Harry que se ha involucrado en cuerpo y alma en todos los eventos relacionados con las Fuerzas Armadas. Después del 31 de marzo eso cambiará.
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¿Y dónde está Archie?
Meghan Markle decidió no llevar a Archie en estos días, hecho, que ha sido muy criticado no sólo por los medios locales sino también por personas cercanas a Buckingham, como el exportavoz de la reina Isabel II de 1988 al 2000, Dickie Arbiter, quien ha tenido palabras muy fuertes para la pareja.
Dickie comentó que es una "gran pena" que la actriz no haya traído con ella a su primogénito para que pasara tiempo con su familia paterna.Calificó este acto como "rencoroso y también es desconsiderado. La reina cumplirá 94 años en abril, no estará con nosotros mucho tiempo. El príncipe Felipe cumplirá 99 años en junio… estuvo en el hospital en Navidad, se veía frágil cuando salió, nadie lo ha visto. La gente se vuelve frágil a esa edad y sería una lástima que Archie no viniera a ver a sus bisabuelos".
Pero los reclamos y las críticas no quedaron ahí: "Ciertamente Meghan está tomando la delantera en todo, mientras Harry sólo la está siguiendo". abundó Arbiter.
Pero la polémica no termina ahí para los duques de Sussex que este mes se despiden de la familia real para comenzar una nueva vida en Norteamérica. Ya se habla de una participación especial de Meghan en una cinta de superhéroes de la productora Marvel , mientras que Harry continuará dando conferencias sobre temas de superación y sustentabilidad.
Hay mucha expectación sobre éstos, los últimos eventos que marcan la agenda del adiós del joven matrimonio, en los que se analizará con lupa no sólo su comportamiento ni el lenguaje corporal, sino también cómo reacciona la gente con ellos.
Mucho se ha comentado la poca empatía que ya muestra el pueblo británico con los Sussex, al punto que ya se inició la recolección de firmas para solicitar al gobierno inglés que no se pague la seguridad de Harry y Meghan con cargo a los contribuyentes y que sean ellos mismos quienes se encarguen de los poco más de dos millones de libras que cuesta al año.
En esta última parte de la agenda del adiós se esperan muchas reacciones, muchos sentimientos encontrados, así como encuentros llenos de tensión en un mes decisivo para los duques de Sussex.