Después de que ayer se anunciara que la reina Isabel prohibió a su nieto, el príncipe Harry, y a su esposa, Meghan Markle, usar la palabra Royal en la marca que registraron anteriormente, la opinión pública y los medios de comunicación ingleses aplaudieron a la soberana esta acción, por la manera en la que está manejando una de las tantas crisis reales que ha vivido Buckingham en los últimos meses.
Aplauden a Isabel el primer castigo que les puso a Meghan y Harry tras el Megxit
Medios británicos aseguran que la reina Isabel está manejando de forma impecable esta crisis en la realeza.
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Incluso, muchos califican su postura de "excepcional", pues en un inicio respondió tibia por el simple hecho de que no quería quedar como la mala del cuento al quitarles de golpe todos y cada uno de los beneficios que se tienen al pertenecer a la familia real. Así que primero les deseó la mejor de las suertes y les dedicó un cariñoso comunicado reconociendo su labor en Palacio, además de que agradeció a Meghan el haberse adaptado tan rápidamente a su nueva vida.
Muchos pensaron que Isabel II estaba perdiendo el control al dejarles todos los beneficios con los que contaban siendo realeza, pero ahora, está claro que fue una estrategia perfectamente orquestada.
Como recordamos, en octubre pasado los duques de Sussex pidieron permiso a la reina para “descansar y alejarse” del acoso mediático, pero ventajosamente usaron ese tiempo para registrar sin permiso de la soberana la marca Sussex Royal en todo el mundo. Con dicha marca, planeaban vender ropa, productos de casa, souvenirs y un largo etcétera con tendrían motivos benéficos. De hecho, el mismo día del anuncio del Megxit lanzaron su plataforma digital perfectamente armada para sorpresa de todos. Harry y Meghan pagaron muchos miles de dólares por esos registros a nivel mundial.
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Un experto en el tema, Rowan Dean, asegura que la pareja cometió un “error fundamental” al hacerlo de esta manera, ya que quien tiene la marca registrada desde hace décadas y es poseedora del título es la misa reina y no ellos.
Así que al anunciar que sus nietos no podrán usar más la palabra “royal” porque ya no lo son, la pareja tendrá que buscar un nuevo nombre para su fundación y cambiar absolutamente toda su plataforma y los registros de marca que hicieron.
Un ejemplo Millennial
El Megxit, además de ser una de las crisis reales más importantes que se han producido en la casa real inglesa en los últimos tiempos, también es un ejemplo de cómo piensa y actúa la generación a la que pertenecen el príncipe Harry y Meghan Markle.
El mismo Rowan Dean aseguró que: “Si ves lo que Harry y Meghan hicieron, es como una especie de metáfora para la generación millennial que pensaron que lo podrían tener todo sin costo alguno para ellos”. Este fenómeno generacional ahora también es evidente en Buckingham.
Pero además Dean agregó: “Pensarías que Harry lo sabía, pero no entiende la institución de la que forma parte su familia: la Familia Real está allí para proteger la constitución en nombre de los contribuyentes británicos” y no para aprovecharse de ellos “Hacer millones, potencialmente miles de millones, a base de la monarquía mientras vives en Canadá, eso es una obscenidad absoluta”.
Con esto, Isabel II demostró que está ahí para proteger a la familia real pese a quien le pese. Mientras llega el 31 de marzo, fecha en la que oficialmente Meghan y Harry dejarán de ser miembros de alto rango de la familia real, un portavoz de los Sussex confirmó que ellos viajarán a Reino Unido para cumplir con al menos seis compromisos más y así finalizar su agenda.
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