La intención del príncipe Harry y Meghan Markle para registrar su marca Royal Sussex ha sido obstruida gracias a un médico australiano. De acuerdo con información de Independent y Daily Mail, la oposición fue presentada por Benjamin Worcester, quien vive en Victoria, Australia y al parecer trabajó como médico del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido entre 2011 y 2014.
Los duques de Sussex iniciaron el registro de la marca Sussex Royal en junio de 2019 ante la Oficina de Propiedad Intelectual del Reino Unido. Como parte del proceso se tuvo un período de oposición, en el que cualquiera puede notificar a la institución de algún reclamo.