Alexi Lubomirski es un fotógrafo británico de origen polaco que fue el encargado de hacer las fotos oficiales de la boda de los duques de Sussex, el príncipe Harry y Meghan Markle. Ahora, el profesional ha revelado algunos secretos del encargo que recibió.
Fotógrafo de la boda de Meghan y Harry revela secretos detrás de sus imágenes
Según reporta el medio británico Mirror, Lubomirski fue advertido de que no habría ninguna foto de la pareja besándose, así como tampoco de los entonces futuros duques corriendo o gritando en los jardines de Frogmore House, en Windsor.
Otro requisito indispensable en el reportaje era que el anillo de Meghan Markle fuera bien visible.
Pero además, el fotógrafo tuvo que lidiar con otro 'enemigo': el tiempo. Según su relato, apenas tuvo 25 minutos para hacer las fotos del reportaje, con un miembro del personal de Windsor acompañándolo y advirtiéndole de la necesidad de que se ajustara al tiempo estipulado.
Lubomirski, no obstante, no vio estas limitaciones como algo negativo: "Creo que es entre estas directrices cuando la creatividad aflora".
Por suerte; Meghan y Harry se lo pusieron fácil: "Literalmente se desplomaron sobre la escalinata, riendo. Se miraban el uno al otro como diciendo: "¡Oh Dios mío!, estamos casados".
Tras lograr la imagen buscada, Alexi confiesa que se echó a llorar, primero por el alivio sentido ante tanta presión y después al comprobar que había logrado una imagen preciosa de los novios. Asegura que los Sussex se mostraron muy naturales ante el objetivo de su cámara en todo momento.