Aunque en su momento parecía que Meghan Markle estaba a punto de iniciar una vida de ensueño junto al príncipe Harry una vez que se casaran y formaran a su propia familia. Dos años después de anunciar su compromiso con el hijo menor del príncipe Carlos y Diana de Gales, el panorama es totalmente distinto, al grado de tener en mente un cambio de residencia.
La pareja actualmente se encuentra en un descanso de seis semanas en California, a donde se dice están pensando mudarse y asentar a su familia lejos del bullicio que rodea a la familia real. Incluso, se especula que allí podría tener a su segundo hijo.