La mejor forma de explicar cómo sentó a los Windsor el documental ITV Meghan and Harry: An Africa Journey es simple: como un balde de agua fría. Así de mal fue recibido en Buckingham.
De acuerdo a fuentes consultadas por el diario The Sun, aseguran que el príncipe Carlos se encuentra muy preocupado de la misma forma en que se preocupaba por su exesposa, la princesa Diana, que utilizaba a los medios para hacerse oír. Ahora su hijo y su nuera están siguiendo el mismo patrón.
Parece que la brecha entre los Duques de Sussex y la familia real es cada día más grande. El mismo diario asegura que el príncipe Carlos está “absolutamente furioso” por las tensiones que surgieron entre sus hijos a raíz del desafortunado documental. Agrega que Carlos está también muy decepcionado de la pareja ya que si alguien apoyó a Harry cuando eligió a Meghan como esposa fue él e incluso se ofreció a acompañar a la norteamericana al altar entre muchas otras cosas.
The Sun publicó que no hace mucho Carlos le pidió a Meghan que se reunieran y aunque confirmó su asistencia, en el último minuto canceló dejando plantado a su suegro. “No puedes hacer eso. Cuando la familia real te invita no hay razón por la que no debas estar ahí” agregó la misma persona.
Una decisión equivoca en el momento equivocado
La intención de Harry y Meghan con este documental y las entrevistas que ofrecieron era humanizar su situación luego de varios meses en el ojo del huracán, sin embargo surtió el efecto contrario. En vez de empatizar con ellos, la opinión pública se volvió en su contra, de hecho las lágrimas de Meghan no fueron suficientes para convencer. Su popularidad se fue al piso, por ello han anunciado que se retirarán de la vida pública seis semanas.
Además en este video dan a entender que la pareja ha sido la encargada de modernizar la monarquía un atributo que definitivamente es falso.
Pero como si el documental no fuera suficiente, el momento en que se dio a conocer también levantó ámpulas pues fue en la semana donde el príncipe William y Kate Middleton se encontraban de gira en Pakistan, un viaje de suma importancia para la corona.
“Todo este alboroto ha minado por completo el trabajo que están haciendo William y Kate en Pakistán” dijo la fuente. Pareciera que Harry lo hizo con toda intención de boicotear la gira de su hermano mayor.
Pero lo peor fue que también por esos días se lanzó el documental “Príncipe Carlos: en el ducado de Cornualles” con el que se quería mostrar cómo es en realidad la vida del heredero a la corona “Este es un documental sobre el trabajo de su vida y realmente significaba mucho para él. Todo el esfuerzo ha sido totalmente aniquilado porque estos dos piensan que han reinventado la institución” comentó también a The Sun.
Poco a poco la pareja se ha ido aislando de la familia real, incluso Meghan rechazó la invitación de la reina Isabel II para pasar unos días en Balmoral durante el verano poniendo de pretexto que Archie estaba muy chico, no obstante, semanas más tarde sí viajó a Nueva York para animar a su amiga, la tenista Serena Williams, en el U.S. Open.
Esto parece ser una guerra familiar en la casa real de Windsor que está dando mucha tela de donde cortar a la prensa internacional pero más allá de eso, a puerta cerrada, está desestabilizando una institución con siglos de existencia.
