Este fin de semana, Meghan Markle viajó a Nueva York sin la compañía de su esposo, el príncipe Harry , ni de su hijo Archie, para apoyar a Serena Williams, quien participó en el US Open de tenis. Aunque la tenista no logró vencer a su rival Bianca Andreescu, la duquesa aplaudió y apoyó en todo momento a su gran amiga.
Sin embargo, la duquesa de Sussex no logró el viaje que esperaba y por el que ha recibido infinidad de críticas que la tachan de incongruente además de no entender su papel como parte de la familia real.