Sin duda, el príncipe William y Kate Middleton se han caracterizado por llevar casi todos los protocolos al pie de la letra, caso contrario de los duques de Sussex, pero un tema relacionado con sus hijos, lo han puesto en jaque.
Resulta que los duques de Cambridge están muy preocupados porque sus hijos: el príncipe George y la princesa Charlotte, quienes tienen un importante papel en la familia real, lleven una vida tan normal como les sea posible, de acuerdo con el portal Vanitatis.
Al parecer, Kate ha querido seguir los pasos de la princesa Diana , quien rompió varios protocolos para que sus hijos pudieran vivir una infancia tan normal como cualquier otro niño de su edad. A pesar de su esfuerzo, Lady Di no pudo lograrlo del todo, algo que muy probablemente también pasará con su hijo y su nuera.
“William es padre muy moderno y Kate es una gran madre”, indicó Ingrid Seward, experta en realeza a la revista People.
Sin embargo, considera que su posición es muy complicada, ya que Diana y ahora, William y Kate no son los únicos integrantes de la familia que han intentado salirse un poco de las estrictas reglas de la corona británica.
"Incluso cuando la reina en los años 50 dijo que sus hijos fueran educados de la manera más normal posible, era una fantasía", dijo la experta.
De acuerdo con el diario británico Daily Mail, uno de los protocolos más evidentes que han roto William y Kate es la relación de sus hijos con los abuelos maternos. Según la tradición, los principitos deberían tener cierta distancia de sus abuelos plebeyos, pero en este caso, la relación es tan estrecha, que incluso, el príncipe Carlos se ha llegado a sentir desplazado.
Otro ejemplo claro es la educación escolar de George y Charlotte, quienes asisten a una escuela mixta donde conviven con otros niños y niñas de su edad. Además, según la revista Vanity Fair España, el príncipe William está muy comprometido con sus hijos , al grado de ser él mismo quien los lleva al colegio.
“Son el príncipe William o Kate quienes llevan a George al colegio, siempre son muy amables. Al príncipe William le encanta platicar con los demás padres, incluso, hace ejercicio con algunas madres en el gimnasio Harbour Club, después de dejarlo en clase”, dijo un padre al medio anteriormente citado.
