Desaparición de princesa conmociona al mundo

Haya de Jordania (hermana del rey Abdullah II, marido de Rania ) tiene a medio mundo en vilo porque… ¡nadie sabe dónde está!

En mayo de este año, Haya rompió su matrimonio con el jeque de Dubai Mohammed bin Rashid Al Maktoum, pero eso no fue todo. Luego del hecho, huyó de su país llevándose con ella a sus dos hijos y una jugosa cantidad de dinero (35 millones de euros).

¿Qué hizo con el dinero? ¿Dónde se estableció? Hasta el momento nadie conoce la respuesta a esas interrogantes, aunque según el Daily Mail, la sexta esposa del jeque de Dubai podría haberse refugiado en Londres.

Medios como el diario ABC y Semana comentan que en un principio, Haya llegó en calidad de refugiada política a Alemana en compañía de sus hijos Jalifa (de 11 años) y Fayed (de siete). Cuando Mohammed bin Rashid Al Maktoum pidió al gobierno alemán que le “devolvieran” a su esposa, las autoridades denegaron su petición.

Crónica de una fuga anunciada

El hecho de que Haya escapara de su país en compañía de sus hijos y con tal cantidad de dinero habla de que ésta fue una fuga planeada con anticipación.

Nadie se había dado cuenta de su ausencia hasta el 20 de mayo, cuando se llevó a cabo el evento hípico Royal Ascot al que la princesa jordana era asidua. Ésta fue la primera vez que Haya no acudió.

Según el diario ABC en su edición digital, para burlar la seguridad que la rodeaba, la princesa consiguió la ayuda de un diplomático alemán quien le dio todas las facilidades para llegar a Berlín; ahí, Haya empezó los trámites de divorcio.

¿Y la familia? De la lámpara. De hecho, el marido está muy despechado y así lo ha hecho notar incluso en redes sociales, donde ha escrito “indirectas” muy directas: “te di confianza y espacio”… “El mayor error que cometiste fue mentir” y “engañaste a la cosa más preciosa”, han sido algunas frases que ha escrito.

En cambio ella, tan activa que era en redes sociales, está desaparecida también de esas plataformas desde febrero, tiempo que se piensa, empezó a planear su gran escape.