¿El hijo de Meghan y Harry elegirá su género? Kensington Palace responde

Hace unos días trascendió la información de que Meghan Markle y el príncipe Harry habían dicho a sus amigos que planeaban educar a su primer bebé de forma “ fluida ” con respecto al género (es decir, que el niño elija con qué género se identifica más) y que no le impondrán ningún estereotipo, según había informado la revista Vanity Fair.

Se había mencionado incluso que la habitación del primogénito de los duques de Sussex está decorada con colores neutrales para evitar cualquier tipo de “confusión” al bebé.
Pero ahora ha sido la propia Casa Real Británica la que ha tenido que salir a desmentir la información. “Esta historia es completamente falsa”, aseguró un portavoz del Palacio de Kensington a través de un comunicado.

Se acerca el nacimiento del primer hijo de los duques de Sussex, programado para fines de abril o principios de mayo. Y aunque esa fecha está cada vez más cerca, también surgen cada vez más las versiones sobre el sexo del bebé.

A través de varias stories de la cuenta harry_meghan_updates, que sigue el día a día de los duques de Sussex , se dieron a conocer supuestas imágenes de la barra de postres del baby shower, cuya decoración revelaría que Meghan está esperando una niña.

En el material se pueden apreciar cuatro torres de macarrones hechos en colores pastel, mientras que en la decoración de la barra predomina el rosa. En las imágenes también se puede ver un frasco de cristal relleno de bombones también en color rosa.

Curiosamente, sobre el sexo del bebé, el Palacio de Kensington no ha desmentido ni confirmado la información, lo que daría pie a pensar que efectivamente, Meghan Markle y el príncipe Harry serán padres de una niña.

Incluso, los propios duques han evadido hablar del sexo del bebé que esperan. “No sabemos si es un niño o niña, lo estamos manteniendo como una sorpresa”, fue la respuesta de Meghan en enero a una alumna de una primaria que visitó en Berkenhead.

Según dicta el protocolo real, está prohibido revelar el sexo del primogénito, pues es la reina Isabel II quien debe enterarse primero que nadie sobre esta información.