Las modas gastronómicas de los royals ingleses a través de la historia

Los conocemos por sus impecables modales y reglas a la hora de sentarse a la mesa, pero lo que no sabemos es que su influencia proviene desde muchos siglos atrás. Descubre la manera en que los royals ingleses acostumbraban comer a través de sus reyes más emblemáticos del pasado.

Rey Enrique VIII (1509-1547)

El famoso rey que cambiaba de esposa como de camisa era un fanático de la comida y los grandes banquetes. A menudo servían pavos reales, faisanes, gaviotas, cisnes y venado. Aunque había mucha carne, también se acompañaba de vegetales que incluían col, chícharos, lechugas y hasta flores. Sólo la mesa del rey tenía todos los platillos del banquete, a los demás invitados se les daban en lo que hoy conocemos como tiempos de servicio. Como todavía no existían los tenedores, el rey y sus invitados comían con las manos y un cuchillo.

Rey Carlos II (1660-1685)

Una de las cosas que lo definió como rey fue su obsesión por la comida. Durante los banquetes, acostumbraba en una mesa mucho más alta que el resto de los comensales. La limpieza era extremadamente importante y por eso, tenía una persona cuya única labor era usar la servilleta para limpiarle la boca entre bocados. Los platos eran súper elaborados, por ejemplo había fuentes que servían agua y vino en las mesas. Una vez en un banquete, los invitados degustaron 145 platos en una sentada.

Reina Victoria (1837-1901)

Ella puso de moda el servicio con vajillas de plata como lo conocemos hoy. Usualmente sus banquetes incluían de 3 a 5 tiempos, pero había veces que había hasta 9 cuando la ocasión lo ameritaba. Usualmente los platos incluían bacalao con salsa de ostiones, pato con salsa de cordero y profiteroles. Había un buffet a un lado de carnes frías y calientes por si te daba hambre entre los tiempos de servicio.

Lo más raro es que siempre se le servía primero a la reina y cuando acababa, se retiraban todos los platos. Cuentan que solía comer rápidamente, por lo que si te tocaba que te sirvieran al último, ni tiempo te daba de comer. Aunque tenía un chef de cabecera, para las fiestas de su Jubileo llevaron 24 chefs de París para cocinar el gran banquete de festejo. La Reina Victoria era muy estricta en cuanto a protocolo de mesa y tenía prohibido contar chistes durante la comida, de hecho muchas de las reglas de etiqueta que usamos hoy en día provienen de ella.