La reina Máxima tiene difícil decisión: apoyar a Argentina u Holanda

"Es una holandesa entre holandeses", dijo hace un año el rey Guillermo en entrevista sobre Máxima, su reina consorte, que por cierto nació a miles de kilómetros de Amsterdam. En Buenos Aires, para ser precisos. Hasta hoy, 12 años después de haber tomado la nacionalidad holandesa, un requisito para casarse con un príncipe de ese país, Máxima Zorreguieta se ha comportado a la altura y su nuevo país le tiene gran afecto.

Hoy, su lealtad será puesta a prueba cuando se enfrenten las dos selecciones de su corazón, Argentina y Holanda, en el duelo de semifinal de la Copa del Mundo. ¿A quién le irá la Reina?

La hemos visto tanto en los Juegos Olímpicos como en diferentes partidos de futbol "hinchando" -así dirían sus paisanos argentinos- por Holanda, pero en un juego tan importante como el de hoy, podría mostrar sus verdaderos colores. Aunque ya se vio en una disyuntiva similar, en el Mundial de Alemania 2006, tuvo suerte pues el resultado fue un empate. Esto sucedió cuando Máxima, por cierto aficionada al Racing de Avellaneda, aún era princesa y no reina, título que obtuvo el 30 de abril del año pasado.

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Cierto es que Máxima, de 43 años, no se ha olvidado del todo de su país. De entrada conserva la nacionalidad argentina -por ley no puede renunciar a ella-, habla a sus tres hijas en español e incluso sigue teniendo propiedades en su país natal. En Argentina también la tienen en mente. En Puerto Madero, uno de los lugares más conocidos de Buenos Aires, existe un discreto monumento en su honor, mientras que la prensa rosa sigue sus pasos como monarca y madre de tres pequeñas holandesas, de las cuales la mayor será reina algún día.