Kate y Guillermo, muy enamorados en Navidad

Los Duques de Cambridge asistieron al servicio religioso que tradicionalmente se realiza en Sandringham y estuvieron todo el tiempo tomados de la mano y lanzándose miraditas amorosas.

Como es tradición, la realeza británica asistió al servicio religioso del 25 de diciembre en Sandringham en Norfolk. Y mientras Kate y Guillermo caminaban hasta la iglesia de Santa María Magdalena se le vio muy sonrientes. Él la tomaba cariñosamente de la mano y de pronto se lanzaban miradas de complicidad.

En cuanto al bebé real, el príncipe George, de cinco meses de edad lo dejaron en casa. Algunos vecinos se acercaron a Kate para preguntarle sobre cómo pasó la Noche Buena su primogénito, a lo que ella contestó "Fue una noche hermosa, pero es tan pequeño que le ilusionó más el papel de los regalos que los juguetes".

Como es costumbre, Kate lució impecable en un abrigo a cuadros verdes y azules de Alexander McQueen, que combinó perfecto con una boina verde y guantes negros.

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Al servicio también asistieron otros miembros de la familia real como Felipe de Edimburgo y el duque de York que encabezaron el andar de la familia.

Por su lado la reina Isabel II se mostró muy amable con las personas que se les acercaban, como los niños que le obsequiaron flores.

Otros asistentes fueron el príncipe Enrique, sus primas las princesas Beatriz y Eugenia; el príncipe Carlos y Camila; el príncipe Eduardo y su familia; Zara Phillips y su esposo Mike Tindall, entre otros.