El desabasto de agua no solo es uno de los grandes retos para la subsistencia de nuestro planeta; también se ha convertido en un indicador de desigualdad social cuando muchas comunidades no tienen acceso a este recurso. Enrique ha recurrido al saber ancestral de la recolección de agua de lluvia para desarrollar Isla Urbana, un proyecto dedicado a impulsar la captación de lluvia en México como mecanismo de atención a esta problemática que afecta a familias con poca disponibilidad, y es una alternativa para reducir la obtención de fuentes naturales o de abastecimiento regular, cada vez más desgastadas. Enrique es uno de los innovadores ganadores menores de 35 según MIT Technology Review (2013). Es licenciado en Diseño Industrial por la Escuela de Diseño de Rhode Island, en Estados Unidos.

Son ya más de 10 años de hacer equipo con asociaciones civiles en temas como transparencia y el cuidado de los mares. La vicepresidenta de Oceana México, una organización mundial centrada en la conservación y protección de los océanos, tiene una tarea titánica que se antoja imposible, pero a ella eso nunca le ha importado. La biodiversidad marina es su principal preocupación, sobre todo en aspectos como la explotación de especies amenazadas, destrucción de hábitats y el crecimiento de un mercado cada vez más voraz de productos marinos. Licenciada en Ciencias Políticas y Administración Pública (por la UNAM), y con una especialidad en Políticas Públicas por la Universidad de Berkeley, esta activista lucha por algo más que tortugas y tiburones.

Admiramos el idealismo de los más jóvenes y de quienes inician movimientos a favor del medio ambiente. Sabemos que la tarea no es sencilla y reconocemos que hace falta apoyar este tipo de iniciativas. Andrés Martínez Zurita es uno de estos jóvenes que creen que todavía estamos a tiempo de decidir el futuro del mundo, y aporta un grano de arena con productos de moda y responsabilidad social. Sí, una de las industrias que más contamina a nivel mundial, bien llevada y con conciencia ambiental, es también una herramienta de ayuda a la naturaleza, ya que por cada producto vendido de esta marca de ropa, se planta un árbol en alianza con Plant For The Planet, reconocido por el programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente. El proyecto incluye una parte interactiva, como el poder monitorear dónde fue plantado tu árbol y el desarrollo del mismo.