Todavía se desconocen detalles de su fallecimiento, pero se sabe que en los últimos años el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, padecía de problemas relacionados con la diabetes, que derivaron en la amputación de una pierna (ya era común verlo en silla de ruedas) y la reducción de la vista, según él mismo confirmó en meses pasados.
En medios poblanos se habla de un paro respiratorio, pero hasta ahora no se ha confirmado la hipótesis. Lo que se sabe es que el mandatario poblano de 63 años había sido internado esta mañana en un hospital de la capital poblana, y después trasladado a la Ciudad de México, donde murió.