Quiere ser presidente. No titubea. Nada más lejos de autoconcebirse como un perdedor. Al contrario. El punto en el que heredará Oaxaca el próximo 30 de noviembre lo tiene más que satisfecho. Gobernar la tierra de Juárez, de Porfirio y de los antepasados de su mujer, fue para él un sueño hecho realidad.
Y a pesar de los 35 puntos de ventaja del morenista Salomón Jara en las elecciones del 5 de junio, la lectura del gober actual es que su tarea de gestión es "Misión Cumplida". El PRI perdió rampantemente en Oaxaca en las pasadas elecciones, igual que en Hidalgo, Tamaulipas y Quintana Roo.
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Y las proyecciones para los siguientes estados en contienda no son buenas tampoco para el tricolor. Pero este priista está cool; él se siente vigente y armado para seguir dando batalla.
¿Protegido? Primogénito de José Murat Casab (también exgobernador de Oaxaca, arquitecto del Pacto por México de Peña y hoy peso pesado en el interior del PRI y en las cámaras), Alejandro Murat ha sabido navegar en las olas de las fuerzas políticas actuales y ondear a ritmo del morenismo y de las nuevas alianzas.
El 2024 no tarda en llegar. Desde que inició el verano, su nombre se asoció a Alejandro Moreno. Para mal, porque él es una de las opciones que suenan para suceder a Alito en la presidencia del partido. Y se asocia también a López Obrador. Para bien, pues se habla de simpatías y confianza.
Se dijo que Murat pudo darse el lujo de pasar de la embajada de Canadá en espera de la posible dirección de la CFE. O de nada, por ahora. Mejor conservar la cercanía del presidente y esperar. Los acomodos ya se están dando.
Mientras tanto, levanta la mano francamente, avienta el sombrero hacia la silla grande y posa para Quién con todo y esposa e hija en los escenarios más emblemáticos de la capital oaxaqueña, que es Patrimonio de la Humanidad: el Teatro Macedonio Alcalá, el Jardín Etnobotánico y el Templo de Santo Domingo.
En plena presentación de la Guelaguetza 2022, nos da una entrevista cargada de reflexiones de pasado y presente y de mucho optimismo de un futuro que vislumbra fuerte.
¿Eras consciente de lo que implicaba el reto de gobernar Oaxaca?
Sí, aunque claramente traía una idea del estado y hacia a dónde lo quería llevar, pero la complejidad humana es un reto. Aquí hay niveles altos de pobreza.
¿Cómo ha sido gobernar Oaxaca por estos casi seis años?
Un privilegio y el honor más grande de mi vida, un sueño que se hizo realidad. Eso me confirma que en la vida puedes conseguir lo que quieres. Me siento muy contento y satisfecho de dónde estamos parados hoy como gobierno.
Sin embargo, tu partido perdió el estado. ¿Es ésta una derrota del PRI o es una derrota de tu gobierno?
Te diría que hay una moda… Yo, como gobernador, he estado obligado a generar una atmósfera propicia para que se llevaran las elecciones de forma correcta, y a respaldar a mi partido como lo hice. Las derrotas tienen otra explicación.
Me parece que la conversación tiene que ver con un momento electoral y las estrategias de cada una de las fuerzas políticas.
Entonces, ¿a quién le atribuyes las derrotas?
Me parece que hemos dejado de construir una narrativa que le pueda transmitir a la sociedad en general una esperanza de un gobierno que puede dar mejores resultados de los que hay. Mientras no tengamos la capacidad de poder compartir ese mensaje, vamos a seguir teniendo derrotas.
Morena, en cambio, ha triunfado en 2018, en las intermedias de 2021 y las de este año…
Es porque han tenido la capacidad de mandar un mensaje y de dar resultados en lo que han prometido. También veo que hay un país dividido y polarizado. No es que solamente Morena haya crecido, es que nosotros cedimos el espacio a Morena, porque estoy convencido de que la alianza hoy no le dice nada a México.
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Ya se empiezan a barajar algunas cartas para las próximas elecciones federales, tú te destapaste para la silla grande… Me agrada la idea. Sí. Estoy listo para abrir la conversación. Mi primer objetivo es cerrar muy bien y luego salir a compartir las experiencias de mi estado. Las cosas se construyen.
¿Por qué buscar la presidencia?
Uno entra a la política porque quiere jugar la historia. Jugar la historia es poder cambiar o transformar la realidad para bien de tu país.
¿En Oaxaca has jugado la historia?
Sí. He tenido ese gran privilegio. Estoy por consolidar el proyecto interoceánico con el gobierno federal, un proyecto que ha sido una ilusión desde que llegó la corona a México y luego continuó con Juárez y Díaz.
Estoy consolidado tres autopistas que van a permitir que hablemos del antes y del después de Oaxaca. Aquí fue donde empecé a ver que sí tengo el empaque y que tengo la capacidad para decir que soy la mejor alternativa para México.
Enfocado en su balón
Para ser candidato necesitas una plataforma política, ¿es tu partido tu plataforma?
Primero soy militante del PRI, y tengo que ganarme la candidatura de mi partido para poder seguir construyendo una alianza más amplia con todas las expresiones sociales de nuestro país y, por supuesto, con todas las fuerzas políticas. Para ganar se debe de construir y dialogar.
En Oaxaca he demostrado que he podido gobernar con todas las fuerzas políticas y que he construido con todas las expresiones sociales de mi estado. He hecho equipo con el gobierno federal y con los 570 municipios.
¿Quieres ser el candidato del PRI o de una alianza como Va por México?
Me gustaría ser el candidato de la gente, ese es mi objetivo. La gran alianza con el pueblo y la sociedad. Por supuesto que tengo claro en dónde estoy y dónde milito, porque soy un orgulloso priista.
Hay historias adversas de gobernadores de tu partido, historias de corrupción. Eso, finalmente, te jugaría en contra…
Por supuesto. El ser humano es proclive a cometer errores y algunos son muy grandes. Los rechazo, los condeno y no los comparto.
La única manera de demostrar que soy diferente es con mi responsabilidad en el ejercicio público, haciéndolo diferente y rindiendo cuentas. Uno puede responder por lo que uno ha hecho, y es ahí donde uno se queda.
¿El PRI no es "más de lo mismo"?
En todos los partidos hay éxitos y fracasos. Más allá de los partidos están las personas. Es ahí donde deben estar las apuestas.
¿Alejandro Murat para presidente?
Por supuesto que quiero ser presidente. Voy a buscar construir esa oportunidad a través de reflexiones y una conversación abierta, y por supuesto, presentando argumentos duros.
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Lo digo de manera clara: todos pueden vender espejitos, pero la primicia no es el diagnóstico, sino quién puede ejecutar y llevar a la realidad un plan. Y yo he demostrado que en Oaxaca lo que planteé, se ejecutó.
No se trata de administrar los problemas o la realidad, sino de transformar en algo mejor. Siempre soñé con ser gobernador y se hizo realidad, pero eso es una aduana: lo siguiente es aspirar y soñar con ser presidente.
¿Qué te convierte en una opción viable de voto para el 2024?
Soy un hombre que ha dado resultados a través de mi vida. Soy un hombre que sabe hacer equipo aun cuando estoy frente a diferentes maneras de pensar. La parte más importante es el diálogo, y eso es lo que le hace falta a México.
¿Y de Morena, ¿quién crees que deba ser el candidato para el 2024?
Yo estoy pensando en Alejandro Murat y en la conversación que debemos tener muchos como yo con la sociedad mexicana. Esto es como el futbol: si tú te enfocas en tu balón, vas a tener más probabilidades de meter gol.
Un hombre que sueña
Tienes 46 años, ¿te ha pegado la crisis de la edad?
Estoy súper feliz y agradecido. Me siento privilegiado de estar en esta etapa de mi vida, de lograr este sueño de mi infancia que era ser gobernador.
Aparte lo he hecho acompañado de lo mejor que tengo, que es mi familia. No tengo una esposa: tengo una amiga y una novia empresaria y exitosa.
¿Cómo es tu vida social fuera de la política?
Te diría que mi mejor amiga es mi esposa porque es mi compañera, cómplice y fortaleza. La mayor parte del tiempo libre que tengo se lo dedico a mis hijos y a ella. Tengo muchos amigos de diferentes expresiones sociales y me gusta divertirme. La parte más relajada de la vida la hago más en privado.
¿Cómo haces para no subir de peso en este estado donde se come como se come? ¡Todos te ofrecen algo siempre!
Hago ejercicio todas las mañanas, es parte de mi terapia, pero también de mi alegría. Eso de que sueltas endorfinas es verdad, así que corro, nado y hago bicicleta. Corro entre 5 y 10 kilómetros diarios. Hago una hora de ejercicio aeróbico y después un poco de pesas, donde saco todo.
Por supuesto como bien. Soy el primer fan de la gastronomía de Oaxaca. Como de todo y no tengo límites, pero soy disciplinado.
¿A qué hora empieza tu día?
A las 6:00 a. m. para mi hábito de ejercicio. Te voy a decir algo: las mejores ideas y el momento más lúcido de mi día es en ese espacio.
También estoy convencido de que el deporte te oxigena el cerebro y te permite ver con mucha más claridad las cosas que requieren solución. Además, mi esposa también lo hace, así que nos ejercitamos juntos.
Tienes dos hijos pequeños, una adolescente y una hija más con suficiente edad para votar, ¿qué preguntas complicadas te han hecho?
Tengo tres hijas hermosas, muy inteligentes y exigentes que tienen muy claras sus ideas sobre los derechos de la mujer, por ejemplo.
En una ocasión le dije a mi hijo que lo iba a llevar a un juego de futbol y una de mis hijas me reclamó que era un machista porque solo lo invité a él cuando a ella también le gustaba.
¿Qué le contestaste?
Le dije: Gracias por decírmelo. Para mí fue una gran lección, aprendí que la igualdad se construye todos los días, minuto a minuto y parte de la casa. Estoy convencido de que en la vida, para ser exitoso, también hay que serlo en la familia.
¿A quién le pides consejo para tomar decisiones?
A mi familia, por supuesto: a mi esposa, que es parte fundamental; a mi padre, que también está presente. Y bueno, también a mi soledad. Al final, lo más importante que uno aprende es que las decisiones que tomas son individuales. Y es en esta intimidad, en esa soledad, tienes que tomar las mejores decisiones para la gente.
¿Qué te gusta leer?
Me gustan mucho las biografías de diferentes tipos de personajes de la historia. También me gustan las de políticos, del sector empresarial y del deporte, las historias en las que hay perseverancia y sueños. La política te da la plataforma más importante, no para construir sueños personales, sino colectivos, de toda la sociedad.
El 'consen' de López obrador
¿Cómo es tu relación con el presidente?
Quiero decirte que la política no es un tema de cariños sino de resultados. Por supuesto que agradezco y que es una gran fortaleza para Oaxaca que yo tenga la oportunidad de haber construido una relación de amistad con el señor presidente, pero también una relación de resultados, que es lo más importante para los oaxaqueños.
Los objetivos del presidente son mis objetivos, y mis objetivos son los suyos. ¿Y cuáles son esos?: que le vaya mejor a Oaxaca.
Estoy convencido de que siempre es mejor tener un gran equipo. Son los equipos los que ganan campeonatos, no las individualidades. Cuando quieres, te puedes poner de acuerdo en las coincidencias y hacer a un lado las diferencias, y dar resultados a quien te debes, que es la gente.
¿Ya lo conocías? ¿Cómo surgió la amistad?
Lo conocí en una reunión cuando era presidente electo y yo era gobernador. Le regalé un libro de Juárez.
Yo soy muy práctico. Oaxaca es un estado que depende 95% de la federación, así que pensé: tengo que ser muy astuto para bajar la lana que ellos tienen. Oaxaca es un estado que recauda 3 mil millones, contra Nuevo León, 40 mil millones, o el Estado de México, 80 mil millones.
Vi lo que él quería. Nos empezamos a hacer amigos. Todo lo que él prometió, lo prometí yo antes. De repente el presidente me dijo: “Yo quiero hacer las carreteras”, y le dije: “Yo también”.
¿Qué le ha dado López Obrador a Oaxaca?
Hemos podido construir juntos obras muy importantes. Te diría que hoy traemos 30 mil millones de pesos –por primera vez en la historia–, en infraestructura entre el estado y el gobierno federal, pero no solo se trata de obras, también en políticas públicas, proyectos que van a permitir que hables del antes y el después de Oaxaca.
Hoy se habla de tres "P's" a nivel mundial: planeta, personas y productividad. Me parece que los de Oaxaca incluyen estas tres , y eso es un valor intrínseco que hemos construido el presidente y yo.
¿Hay riesgo de pasar de ser uno de los gobernadores más queridos del presidente a volverse enemigo electoral de su proyecto?
Ahí es donde radica la gran oportunidad. Lo que planteo es una tercera vía, porque me parece que hay aciertos en la 4T. Por ejemplo, comparto los programas de transferencia económica, lo que no comparto es que no se puedan evaluar.
Hoy se están entregando más de 460 mil millones de pesos en programas de transferencias económicas y yo estoy convencido de que son buenos, nada más que hay que evolucionarlos y mejorarlos.
¿Es AMLO el mejor presidente que ha tenido México?
Creo que es un presidente que le ha dado a Oaxaca mucho y ha atendido una deuda histórica. A mí, como gobernador de Oaxaca, se me presentó esa oportunidad y claramente la tomé.
¿Eres el gobernador de oposición consentido del presidente?
Eso se lo tendrás que preguntar a él [risas], pero yo le agradezco mucho las referencias que ha tenido con Oaxaca y por supuesto, conmigo.